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cayetano y maria cerqueira hola 4162© PREMIER PHOTO PRESS

EXCLUSIVA

Cayetano Rivera y Maria Cerqueira, puro romanticismo en Sevilla de una pareja que se consolida

Disfrutan de unos días de descanso y sol en Sevilla, al término de la Feria y antes de que el diestro vuelva a los ruedos, con San Isidro en Las Ventas


7 de mayo de 2024 - 9:00 CEST

Fue con una entrevista. Se cumplen ahora exactamente cinco años de entonces. Ocurría en la plaza de toros ‘Campo Pequeno’ de Lisboa, donde Maria, presentadora de la cadena TVI, recibía al diestro como invitado de su programa. La vida da muchas vueltas y, ahora, la periodista portuguesa y Cayetano Rivera celebran poco más de un año de relación sentimental paseando, plácidamente, por las románticas calles de Sevilla.

Cayetano y Maria Cerqueira HOLA 4162© PREMIER PHOTO PRESS
Cayetano y Maria Cerqueira HOLA 4162© PREMIER PHOTO PRESS
La periodista y el torero no se sueltan ni un instante. Entre caricias, sonrisas, gestos y conversaciones cómplices, la pareja, como dos enamorados más, paseó a lo largo del Guadalquivir, después de una comida romántica en Triana.

En febrero de 2023 saltaba la noticia de que los amigos —tras sendas separaciones— se habían reencontrado y se habían convertido en pareja. Se sucedían las fotos de ambos en el aeropuerto, o en los canales de Venecia, o viendo un atardecer en el Chiado lisboeta, o disfrutando de unos días de playa, o rigurosamente abrigados en El Recreo de San Cayetano, de Ronda, para pasar  la Nochevieja . Lo habitual del primer año de noviazgo, cuando uno está enamorado y no para quieto.

Cayetano y Maria Cerqueira HOLA 4162© PREMIER PHOTO PRESS
Cayetano y Maria Cerqueira HOLA 4162© PREMIER PHOTO PRESS

Ahora, al comienzo del segundo, empieza el sosiego, el compromiso, eso de ser uno el hombro del otro. El pasado marzo, en Écija, Maria acudía por primera vez al ruedo donde ‘su chico’ se jugaba la vida. Ahora, la capital hispalense, como muestran estas imágenes en exclusiva, vuelve a ser el escenario de un amor que les impide separarse, ni tan siquiera dos milímetros escasos.