La apuesta por las ficciones turcas no cesa y el hambre del público por consumir, el que se ha convertido en uno de sus géneros favoritos, tampoco. Por esa razón, los amantes de las telenovelas otomanas suman un nuevo título con el que dejar volar su imaginación: La presa, la nueva serie que acaba de aterrizar en Nova. La producción está protagonizada por Feyyaz Duman, un actor muy popular en nuestro país por su papel de Arif en Mujer, y por Biran Damla Yilmaz, una de las intérpretes más seguidas y famosas de Turquía a la que muy pronto también veremos como Kumru en Pecado Original. Ahora, ambos unirán sus caminos como el cariñoso e inseguro Nazim y la bella Nehir en una apasionante historia de amor sobre una pareja que se conoce por Internet.
Como buena telenovela, la ficción cuenta con un apasionante triángulo amoroso en cuyo tercer vértice tenemos a Burak Yörük, quien dará vida al guapo Tarik Yilmaz, un hombre que intenta aprovecharse de un error del protagonista para conseguir sus objetivos. Los escenarios son parte integral de la serie, ya que la trama se desarrolla y va creciendo en paralelo a la construcción de una presa hidroeléctrica. La acción también se desarrolla en un pueblo cercano ya que ahí viven muchos de los personajes y tienen lugar otras de las historias relevantes de la ficción, con conflictos familiares, amorosos y sociales.
¿Qué veremos en La presa?
Todo comienza cuando Nehir, decidida a dejar atrás su oscuro pasado engañando a hombres, quiere comenzar una nueva vida y encontrar el amor verdadero. Es entonces cuando conoce a Nazim por internet, un hombre de mediana edad que pronto se enamora de ella. El problema aparece cuando la joven le pide una foto para ponerle cara a la persona que está al otro lado de la pantalla. Preso de su inseguridad, Nazim, que está muy acomplejado por una cicatriz que tiene en el rostro, decide mandarle a la chica una imagen de Tarik, un atractivo joven que trabaja para él en la construcción de una presa.
El protagonista no tardará en ser consiente del grave error que ha cometido al no decirle a Nehir la verdad sobre quién es, pero solicitará a su empleado que le ayude para poder mantener su mentira. Conforme va pasando el tiempo, los engaños se vuelven más complicados y Nazim se ve sumido en una auténtica encrucijada donde tendrá que decidir si confiesa la verdad aún a riesgo de perder a la única mujer a la que ha amado sin ni siquiera haber visto en persona.
Pero el constructor no es el único que tiene secretos, ni que se siente atrapado por un rasgo que marca su vida y su rostro. Nehir es una chica joven y guapa que usa su belleza para seducir a hombres ricos para casarse con ellos y hacerse con su fortuna. Desde que sus padres la abandonaron, ha estado viviendo con Zerrin (Sumru Yavrucuk), la mujer que establece los planes y se hace pasar por su madre. Las cosas se complican cuando la muchacha ve publicada su foto en el periódico debido a su última estafa.
Nehir está cansada de estos fraudes. La joven quiere dejarlo todo atrás, por lo que empieza a pensar en sí misma e intenta buscar un futuro mejor al tiempo que se siente feliz cuando habla con Nazim. Pero, cuando la chica decide abandonar su vida como estafadora, la banda con la que trabaja no se lo va a permitir tan fácilmente y se convertirá en "presa" de su pasado.
Un trepidante triángulo amoroso
Nazim es un hombre de mediana edad que trabaja como administrador de la presa. Tiene una cicatriz en la cara, lo que le acompleja y le dificulta comunicarse con las mujeres en persona. Por este motivo, se siente cómodo hablando con Nehir online sin necesidad de tener que mostrar su rostro.
Tras cuatro meses chateando, la joven quiere saber más sobre Nazim y le envía su foto. A cambio, le pide que él también le mande una suya. Pero, al ver la imagen y la belleza de la chica, el constructor no encuentra el valor para hacerlo. En ese instante, para no perder a Nehir, toma una precipitada decisión y decide enviarle una foto de Tarik, un chico joven y guapo que viene de Estambul a trabajar en la presa, pensando que, después de eso, ambos seguirán comunicándose a través del teclado como hasta ahora y que esa instantánea no le va causar ningún problema.
Por su parte, Nehir decide ir a la presa donde trabaja Nazim para darle una sorpresa. Sin embargo, esta visita inesperada pondrá al hombre contra la espada y la pared. Aun así, se armará de valor y decidirá conocerla en persona y presentarse. Pero al verlo no lo reconoce ya que cree que haber estado hablando con otra persona.
En ese momento, para tratar de reconducir la situación, Nazim decide presentarse con el nombre de Tarik, su ayudante. Acto seguido le explica la situación a su trabajador y le pide ayuda desesperadamente: solicita al chico que se haga pasar por él durante cinco minutos y despida a Nehir.
Tarik acepta echarle una mano a su jefe y empieza a aprovechar la situación para huir de la obra donde trabaja. Cuando el muchacho conoce a Nehir en persona, rompe su promesa y comienza a usar su presencia por interés y ambición personal. Así que convence a la chica para que se quede y así poder volver a Estambul. Aunque el joven y Nazim son dos personas completamente opuestas, ambos harán todo lo que esté en sus manos para no salga a la luz la verdad sobre sus identidades.