Entramos en la gala de los Laureus, los ‘Oscar’ del deporte

Todas las anécdotas, reencuentros y sorpresas de una noche inolvidable

30 de abril de 2024 - 9:10 CEST30 abr 2024 - 9:10 CEST

De Usain Bolt a Jude Bellingham, de Nadia Comaneci a Aitana Bonmatí, de Tom Brady a Carlos Alcaraz… Grandes leyendas del deporte de todos los tiempos se dieron cita en la entrega de los Premios Laureus World Sport 2024 , celebrados por primera vez en Madrid en sus 25 años de historia.

Diego Simeone y Carla Pereyra, Raúl González y Mamen Sanz, Garbiñe Muguruza y Arthur Borges y Paula Echevarría con Miguel Torres, un dream team de lujo reunido por ¡HOLA!

Las estrellas desfilaron por la alfombra roja del magnífico palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento madrileño, entre la admiración del público concentrado en los alrededores, ávido de selfis y autógrafos de los héroes de las gestas deportivas de todas las disciplinas. Y es que Madrid se convirtió por unas horas en el epicentro del deporte mundial, con iconos del pasado y del presente reunidos en una noche histórica e inolvidable y con un astro de Hollywood, Andy García , como maestro de ceremonias.

Djokovic obtuvo el quinto Laureus de su carrera al mejor deportista del mundo, igualando así a Roger Federer

image00036-Collage-U55770024040TVo — Arriba, Novak Djokovic posando para ¡HOLA! junto a su mujer, Jelena. Sobre estas líneas, el tenista serbio bromea con el detalle de otra leyenda de las pistas, Martina Navratilova, que llevó a su perrito metido en el bolso a la ‘post party’. A la derecha, Carlos Alcaraz, que en 2023 fue galardonado con el Laureus Revelación del Año. En el centro, Maribel Nadal y Ona Carbonell. La leyenda de la natación sincronizada, que hace un año dijo adiós a la competición, llevaba vestido de Rosa Clará

Nieves Álvarez: atletismo en las venas

Numerosas figuras influyentes del mundo de la moda, el cine y el entretenimiento también acudieron a los considerados “Oscar del deporte”. Entre ellos había, igualmente, muchos mitómanos deseando conocer a sus ídolos. Nieves Álvarez, sin ir más lejos, se quedó con las ganas de ver en persona a Simone Biles . Galardonada con la estatuilla a la reaparición del año —el cuarto Laureus de su carrera—, la gimnasta, considerada la mejor de todos los tiempos, no pudo viajar a Madrid y expresó su agradecimiento en un vídeo. “Soy fan del atletismo. Yo de pequeña lo practicaba y era muy buena en 100 metros y en cuatro por 100”, nos confesó Nieves antes de añadir que esa afición se la debe a su padre: “Era un grandísimo atleta, corría muchas maratones y nos llevaba a correr a la Casa de Campo los fines de semana”, comentó la top model.

Rafa Nadal celebró el premio otorgado a la fundación que lleva su nombre con las mujeres de su vida: su esposa, su madre y su hermana

Quien podría haber llegado a deportista de élite es Laura Escanes. La catalana nos sorprendió al revelarnos que de pequeña nadó “durante muchísimos años y competía en el Club Natación Sabadell”. Laura lo dejó al llegar a la adolescencia, aunque “me encantaba y lo disfrutaba muchísimo. Llegué a participar en el campeonato de Cataluña. Después, hice otras cosas, empecé a bailar, a hacer vóley... Me gusta mucho el deporte”. Escanes coincidió en la gala con buenos amigos, como Marc Márquez y Gemma Pinto. El piloto catalán de MotoGP, que obtuvo el Laureus al deportista revelación en la gala celebrada en Malasia en 2014, y su novia acaban de celebrar su primer año de relación.

De aniversario estarán dentro de poco también Paddy Noarbe y Sandra Garal. La primera contrajo matrimonio el 30 de junio del año pasado con el jugador del Atlético de Madrid Marcos Llorente y la segunda lo hizo unos días después, el 7 de julio, con Marco Asensio, delantero en el Paris Saint-Germain. Paddy y Sandra, a pesar de que sus maridos son rivales en el terreno de juego, son muy amigas desde que se conocieron en la boda de Sergio Ramos y Pilar Rubio y, según nos dijeron, “hacemos muchos planes juntos, viajamos, vamos a despedidas...”.

Boris Becker, miembro de la Academia Laureus, posó con su novia, Lilian de Carvalho, su mejor apoyo en los momentos más difíciles

PH1GLDH220424092-Collage-U23508751163amZ — Arriba, Marc Márquez y su novia, Gemma Pinto, con vestido de Parò y joyas de Bvlgari. A la izquierda, Emilio Sánchez Vicario y su mujer, Simona, y sobre estas líneas, el premio revelación, Jude Bellingham, y Juan Carlos Ferrero

Y una pareja que cumple tres años de relación es la que forman Diego Osorio y la esquiadora olímpica Lindsey Vonn. Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2019, Lindsey es la mujer con más victorias en la historia de la Copa del Mundo de esquí alpino. Como miembro de la Academia Laureus, posó en la alfombra roja, aunque evitó ser fotografiada con el aristócrata y empresario español.

“Arantxa tiene ganas de terminar sus batallas. La admiro aún más por lo que ha luchado”, nos dijo Emilio Sánchez Vicario

Profunda admiración

“Es un privilegio estar aquí y disfrutar de tantas personas que son iconos del deporte”, aseguró Jaime Astrain, que asistió junto a su pareja, la presentadora Lidia Torrent. “Desde Rafa Nadal, Fabio Capello, Induráin...”, enumeró el futbolista retirado y comentarista deportivo. “Yo he hecho deporte toda la vida —apuntó Lidia—. He jugado a balonmano, fútbol, tenis, baloncesto durante cinco años... Siempre me ha encantado competir. Por eso siento una profunda admiración por los deportistas , porque creo que tienen, además de talento, un coco impresionante, porque están sometidos a mucha presión”.

Aitana Bonmatí obtuvo doble premio: mejor deportista y mejor equipo para la selección española femenina de fútbol

_MAC0746-Collage-U71436872415XRe — De izquierda a derecha, la exesquiadora Lindsey Vonn —abajo, su novio, Diego Osorio—; la mujer de Marco Asensio, Sandra Garal, con vestido de Luis Berrendero, y el alcalde de Madrid y su mujer, Teresa Urquijo. Sobre estas líneas, Ana Moya, prometida de Diego Conde, portero del Leganés, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso

“Todos los que están aquí son mentes privilegiadas, tienen una capacidad mayor de sacrificio, de disciplina… de cómo manejar los momentos difíciles”, indicó Emilio Sánchez Vicario, que asistió junto a su mujer, Simona Bronzeti.

El extenista vive en Naples (Florida), a dos horas de Miami, donde reside su hermana, Arantxa, y nos contó cómo se encuentra ella tras sus problemas con la Justicia: “Está ilusionada y con ganas de terminar todas sus batallas. Lo que ha tenido que vivir ha sido muy duro, pero está acostumbrada a disputar partidos difíciles y creo que ha salido reforzada de esto. La admiro, aún más, por cómo lo ha luchado y trabajado”.

Diego Osorio y su novia, la exesquiadora Lindsey Vonn, acudieron juntos, mientras que Teresa Urquijo, recién llegada de su luna de miel con Martínez-Almeida, desfiló por primera vez por la alfombra roja

GettyImages-2149704670_20240429113501-Collage-U26160844540foT — Arriba, Ana Bono y Andrea Pascual, que acudió con su marido, Beltrán Gómez-Acebo, y coincidió con su cuñada Simoneta (sobre estas líneas, con su hijo Pablo Fernández-Sastrón). En el centro, la piloto Carmen Jordá, de Ze García y con Joyas de Bvlgari. Sobre estas líneas, Tom Brady, siete veces campeón de la Super Bowl y exmarido de Gisele Bündchen

Raúl González, exjugador del Real Madrid, y su mujer, Mamen Sanz, son padres de cinco hijos y todos ellos han seguido los pasos de su padre en el mundo del fútbol, incluida la más pequeña, María, que a sus 14 años juega en el Real Madrid. La pareja se reencontró con buenos amigos, como Garbiñe Muguruza y su prometido, Arthur Borges, y Paula Echevarría y el también futbolista retirado Miguel Torres. Junto a ellos posaron otro de los gigantes del balón, Diego Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, y su mujer, la modelo Carla Pereyra.

A Raúl le correspondió entregar el premio Sport for Good a la Fundación Rafa Nadal. El organismo creado por el tenista manacorí utiliza el deporte y la educación para inspirar a más de 1.000 jóvenes de comunidades económicamente desfavorecidas de España e India. “Como dijo Mandela, el deporte tiene el poder de cambiar el mundo. Nosotros creemos en esa idea y llevamos desde el año 2010 con este proyecto. Este trofeo empuja a nuestro equipo a seguir trabajando, a seguir creyendo que el deporte tiene el poder de cambiar”, dijo Mery Perelló, directora de la fundación, en su inspirador discurso. “Este trofeo es también para los chicos que han estado en nuestros programas desde que comenzamos”, señaló entre los aplausos de los asistentes.

Tras la gala, Nieves Álvarez, Lidia Torrent y Jaime Astrain, Paddy Noarbe y Laura Escanes no se perdieron la divertida post party de Don Julio

Djokovic: “es surrealista”

Entre los invitados que entregaron las estatuillas se encontraban algunos de los nombres más importantes del deporte mundial. Tom Brady , siete veces campeón de la Super Bowl, entregó a Novac Djokovic el de mejor deportista del año. “Es surrealista recibir este premio de ti —le dijo el tenista serbio a Brady—. Has sido mi héroe. Es un honor recibirlo. En esta última hora, hora y media, se te pone la piel de gallina viendo todos los deportistas que hay en esta sala que han logrado un impacto en el deporte y que siguen inspirando con cada acción, con cada gesto, con cada pase que dan”.

image00061-Collage-U86571065353GeO — Arriba, Nieves Álvarez, con ‘look’ de Pronovias y joyas de Bvlgari, nos confesó que de pequeña hacía atletismo ‘y era muy buena en 100 metros y en cuatro por 100’. Sobre estas líneas, los modelos Anselmo Menéndez y Giovanna Kellem. A la derecha, la DJ que animó la fiesta

“Este trofeo también es para los chicos que han estado en nuestros programas desde que comenzamos”, afirmó Mery Perelló en su agradecimiento

Usain Bolt, el mejor velocista de todos los tiempos, entregó el premio a la deportista del año a Aitana Bonmatí. Y el ganador del premio a la revelación del año en la última edición, Carlos Alcaraz, entregó el Laureus de esta categoría a Jude Bellingham, el actual talismán del Real Madrid.

Una vez terminada la gala, los asistentes disfrutaron de una animada post party , ofrecida por Don Julio, en la planta superior del palacio de Cibeles. Disfrutando de las mejores vistas de Madrid y entre cócteles, los Laureus se despidieron hasta el año que viene con muy buen sabor de boca.