Ramón García lleva desde 2016 al frente de En compañía, el programa por excelencia de Castilla-La Mancha Media. En estos ocho años, el presentador ha vivido momentos únicos con los invitados y el público, pero también ha sufrido en silencio. "Yo he pasado en En compañía los momentos más duros de mi vida. Perdí a mi padre, perdí a mi madre, me divorcié, y nadie sabía prácticamente nada. Yo me venía todos los días callandito, con mi dolor, con las lágrimas de ahora también", ha confesado al borde del llanto en una entrevista concedida al espacio radiofónico La Rotonda, de la cadena manchega, con motivo de la celebración de los 2.000 programas de En compañía.
El padre del presentador vasco perdió a su padre en noviembre de 2019. En julio de 2021 se hizo pública su separación de Patricia Cerezo, pero la ruptura se produjo mucho antes. "Es una separación amable entre dos personas que se siguen queriendo mucho. Tenemos desde hace tiempo la sentencia de divorcio. Lo hemos llevado con mucha discreción. Nos ha llamado la atención que la noticia saltara ahora", dijeron en ese momento los dos en conversación telefónica con ¡HOLA!. Meses después, en noviembre de 2021, el comunicador tuvo que hacer frente a la muerte de su madre. En menos de dos años, los cimientos de su vida se tambalearon y él, a pesar del profundo dolor que sentía, no se alejó de los focos.
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De hecho, tras el fallecimiento de su madre se incorporó rápidamente al trabajo y dedicó estas bonitas palabras a los espectadores: "Permítanme que les dé las gracias por estos días, por sus sentimientos de pésame que me han hecho llegar todos ustedes por el fallecimiento de mi madre. Gracias por el cariño y por ayudarme a mantenerme de pie en unos momentos complicados. Pero esto es la vida y hay que seguir adelante. Yo siempre les digo que las personas que hacemos televisión, que estamos delante de la cámara, a veces ustedes creen que somos de otro planeta, que somos diferentes. No, nos duelen las mismas cosas, sufrimos las mismas cosas, y se nos mueren los padres y las madres como a ustedes. A mí en dos años se me han muerto los dos haciendo este programa, por eso siempre digo que hacer este programa y ustedes para mí son muy, pero que muy importantes".
Tras recordar este momento, el locutor de La Rotonda ha exclamado: "Qué bonito es hacer televisión, pero qué duro es a veces salir a un plató". "Durísimo", ha respondido Ramón sin dudarlo. "Yo me decía: 'Tienes que hacerlo, Ramón. Tienes que ponerte delante'. La gente está ahí esperando que hagáis el programa y tenemos que estar ahí. Ha sido durísimo, pero yo creo que ha sido la mejor terapia para mí, reincorporarme muy rápido después de cada momento complicado y difícil de los últimos años de mi vida. Me ha ayudado mucho la gente, el cariño del equipo, los espectadores y la gente que venía al programa", ha asegurado. Después, le ha dado las gracias a su compañero de cadena por rescatar una de sus apariciones televisivas más sinceras. "Ha sido muy bonito, gracias por recordármelo, me he emocionado mucho, yo quería estar echando risas", ha añadido.
A sus 62 años, el presentador vasco está centrado en el trabajo y en el cuidado de sus dos hijas, Natalia y Verónica. "Soy un hombre que invierte mucho tiempo en mi trabajo y en mis hijas", dijo en una entrevista concedida a Plano General, de La 2. "Salgo con los amigos, me voy a Bilbao con la cuadrilla... pero ligo menos que los gases nobles, es una cosa terrible", afirmó con humor sobre cómo transcurre esta etapa, donde "el día que llegue el amor, estaré feliz de la vida".