La Casa Blanca ha abierto sus puertas a 40.000 personas para celebrar la Pascua en un impresionante acto organizado por el presidente Joe Biden y su esposa, Jill Biden. Continuando con una tradición que comenzó en 1878 de la mano del entonces presidente Rutherford B. Hays, el matrimonio ha recibido a miles de niños en los jardines de esta residencia presidencial en la que han organizado un amplio programa de juegos llamado Easter Egg Roll
Además de buscar huevos escondidos y hacerlos rodar por el jardín de la parte sur de la vivienda, en la Casa Blanca se ha instalado una carpa con actividades educativas, un escenario con actuaciones, había una zona de merienda e incluso ha habido charlas de granjeros que han enseñado a los más pequeños cómo cuidar de los animales
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Joe Biden ha saludado personalmente a los niños que se han acercado a la Casa Blanca, donde los actos han sufrido cambios de última hora. Estaba previsto que la jornada comenzara a las 7 de la mañana, pero una tormenta ha obligado a retrasar el inicio una hora y media
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Entre vítores y aplausos se ha celebrado el juego en el que los niños tienen que hacer rodar por el jardín de la Casa Blanca huevos de colores ayudados por cucharas de madera. El público ha seguido con intensidad la competición, compuesta de nueve rondas en las que Jill Biden vigilaba que las normas se cumplieran y daba el pistoletazo de salida
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El presidente y la primera dama han invitado a formar parte de este divertido Lunes de Pascua a militares y veteranos que han acudido junto a sus familiares. También había disponibles entradas que se han sorteado online
El presidente Biden ha dicho que la Pascua "nos recuerda el poder de la esperanza y la renovación, el sacrificio y la resurrección, pero sobre todo el amor y la tolerancia"
La educación ha sido el eje del evento, llamado EGGucation, y se han hecho actividades como un rincón de lectura. "Soy maestra, así que me encanta cualquier momento en el que podamos convertir la Casa Blanca en un aula como estamos haciendo hoy", ha dicho la primera dama
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La Casa Blanca ha sido decorada para la ocasión con guirnaldas y miniglobos aerostáticos de diferentes colores, cada uno con el nombre de una asignatura. Por supuesto, no han faltado los conejos de Pascua, que han saludado junto a los Biden desde el balcón
Hunter Biden, hijo del presidente y su primera esposa, también se ha acercado a la Casa Blanca para vivir en primera persona esta jornada marcada por la tradición y la historia
Antes de ejercer de anfitriones en la Casa Blanca, los Biden han disfrutado de unos días de desconexión en familia en Camp David, la residencia de campo del presidente. Sobre estas líneas aparecen en las inmediaciones del Arsenal de Washington, fuerte del Ejército norteamericano, llevando de la mano a Beau, el menor de sus siete nietos. También les acompaña su hijo Hunter y su nuera Melissa
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