El rostro de Carlota Casiraghi lo dice todo: vuelve a estar ilusionada. La bella hija de Carolina de Mónaco exhibe esa sonrisa imborrable, que se les dibuja a aquellos que viven las primeras fases de una relación amorosa. Esa sonrisa que acompaña a la sensación de que vas flotando en vez de caminando, de que todo te parece bien, de que todo te hace gracia. Y esa es la sonrisa que Carlota muestra en las imágenes que ilustran estas páginas, las primeras en las que vemos a la joven Grimaldi con Nicolas Mathieu a plena luz del día, y que confirman que hay algo entre ellos. No hay besos, sus manos apenas se rozan... pero la complicidad es evidente. Saltan chispas.
A finales de febrero, la revista francesa Voici lanzó que había un romance entre la guapa monegasca y el afamado escritor, que había sido fotografiado, en varias ocasiones, saliendo de la casa que ella tiene en París. El mismo medio, junto a Il Messagero de Italia, ya han dado por roto el matrimonio de Carlota y Dimitri Rassam, de los que desde hace meses se dice que atraviesan una fuerte crisis. De ser ciertas las especulaciones, la sobrina de Alberto II de Mónaco y el productor cinematográfico se habrían divorciado después de cuatro años de casados (más dos de noviazgo) y un hijo en común, Balthazar, de cinco años.
La hija de Carolina de Mónaco muestra en todo momento una imborrable sonrisa, síntoma de que ha recuperado la ilusión junto al afamado autor
En verdad, las fotografías que nos ocupan no pueden ser más elocuentes y parecen revelar que Carlota se siente libre, con todos los papeles en regla, sin cargas, para iniciar una relación sentimental. En ellas, vemos a la pareja caminando por París con bolsas de viaje y, después, sentada en la terraza de una brasserie, tomando un café, muerta de la risa. En especial Carlota, que no para de reír mientras escucha las ocurrencias de Nicolas, quien, además, le dedica, tras sus gafas, miradas de lo más seductoras.
Apasionada de la Literatura, la hija de la princesa Carolina se muestra totalmente fascinada con Mathieu, un novelista de gran éxito en Francia: a sus 45 años tiene en su haber el prestigioso premio literario Goncourt —lo ganó en 2018 por “Sus hijos después de ellos”—; también ha obtenido otros galardones literarios por “A los animales de la guerra”, una de sus primeras obras, que también fue muy celebrada por su adaptación a serie de televisión.
Hablando de amor
A principios de marzo, el escritor habló de amor en el plató del programa La grande librairie, de France 5. “En una historia de amor, al principio buscamos ponernos de acuerdo, en el sentido musical del término, es decir, tocar no en la misma melodía, sino en el mismo tono”, afirmó sin desvelar el nombre de la afortunada. “Para estar de acuerdo, hay que ponerse a tono con las definiciones, con el vocabulario, con los apodos. Es un poco ridículo, pero así es como empieza”, añadió el escritor, nacido de un mecánico y una contable en el barrio obrero de Epinal, en los Vosgos, al noreste del país.
Apasionada de la Literatura, Carlota tiene mucho en común con el escritor, de 45 años, un novelista de gran éxito en Francia
Además de sus inquietudes intelectuales, Carlota y Nicolas tienen en común la paternidad. El autor, divorciado, tiene un hijo de once años, llamado Oscar. Y la monegasca, como es sabido, es madre de Raphäel, de diez años, nacido de su relación con el cómico Gad Elmaleh, y del pequeño Balthazar.