El programa de Albert Espinosa, ya lo advirtió él mismo, está marcado por las emociones. Las que viven los invitados al recorrer y recordar el camino que hacían en cuando eran niños para llegar al colegio. Es entonces cuando les embargan los recuerdos y se ven desbordados por los sentimientos al pisar las huellas de quienes fueron y pensar en quienes echan de menos y ya no están. Norma Duval visitó en la última entrega las clases del Carmelo Teresiano, en Madrid, donde estudió, encontrándose con las profesoras y recordando los bailes que ensayaba en el patio cuando soñaba con ser bailarina. Ya entonces no pudo evitar las lágrimas al recibir el cariño que le trasladaron sus antiguas profesoras. "Para nosotras es una alegría y una satisfacción. Y que no sea solamente hoy, puedes venir más veces, ¡aquí está tu casa!" dijo una de ellas.
En estas escenas de su infancia no podían faltar sus hermanos. Espinosa reunió a Norma con su hermano Albi en El Pinar para que ambos recordaran a su hermana pequeña Carla, fallecida en octubre de 2010 a los 46 años tras una larga enfermedad de cáncer de cuello de útero. Albi contó que "siempre habían sido una piña", gracias a que su madre se encargó de ello. Recordaron los dos que Carla era como un "juguete" y no dudaron en afirmar que la echan muchísimo de menos. Carla solía decirle a Norma que tenía mucha suerte pues todo le salía bien, así que Norma asegura que la muerte de su hermana fue "lo único frustrante" porque lo demás en la vida le ha salido bien. "Me llamaba kawasaki" contaba Norma.
Albert llevó después a la artista al teatro Calderón, donde Norma debutó como artista junto a nombres tan recordados como Carmen Sevilla. Allí aceptó ver un fragmento de una entrevista con Carla. "Te lo permito todo" dijo ya con la voz entrecortada por la emoción. En aquella entrevista Carla contaba los momentos más felices de su infancia con su hermana Norma, que no podía evitar llorar al verla. "Qué guapa está y cuánto la echo de menos. Era más como una hija que como una hermana y es una herida que nunca se cura. Al final, a todas las familias nos falta alguien. Si no es un hermano es tu madre, es tu padre, es tu mejor amigo, es tu novio, es tu marido… siempre hay alguien que falta. Hay que sobrellevarlo y hay que aceptarlo, pero yo no lo acepto. Ella no debería haberse ido tan pronto porque no le tocaba" dijo.
Las hermanas se adoraban
La muerte de Carla Duval fue un golpe durísimo para Norma que estaba muy unida a su hermana. Carla era uno de los pilares fundamentales en la vida de la vedette y la enfermedad se la llevó de manera prematura a los 46 años. La también actriz había superado en el año 2007 un cáncer de cuello del útero tras someterse a varias intervenciones quirúrgicas y a numerosas sesiones de radio y quimioterapia. No obstante, este mismo verano sufrió una recaída y tuvo que abandonar la obra de teatro en la que estaba trabajando, Brujas, por consejo médico y para centrarse única y exclusivamente en su recuperación. Tampoco pudo seguir dedicándose a la pintura, una de sus grandes pasiones que le brindó muchas alegrías debido al éxito cosechado en las exposiciones de algunas de sus obras.
Carla tenía tres hijos, Juan Carlos, nacido de su relación con Rafael Rojas y que lleva una vida muy discreta, y las gemelas Paula y Andrea, fruto de su matrimonio Santiago Paredes del que estaba separada (falleció en 2016). Tras su muerte, las niñas, que tenían entonces once años, fueron a vivir con Norma y aunque Juan Carlos tenía 20 años también se ocupó de él como una madre. Ella se encargó de la crianza y educación de las niñas mientras la necesitaron. "Mis sobrinas ya están en el camino de volar solas y considero que mi etapa educacional con ellas ha concluido, aunque nunca dejaré de estar pendiente, por supuesto", decía la propia Norma en las páginas de ¡HOLA! cuando cumplieron 19 años. Ahora tienen 24 años y derrochan estilo, mostrando su pasión por la moda (Andrea) y la pintura (Paula).
Norma tiene tres hijos, Marc, Yelko y Christian, fruto de su unión con Marc Ostarcevic, y dos nietos, Izan (hijo de Marc) y Valentina (hija de Yelko). En noviembre de 2022, la revista ¡HOLA! anunciaba en exclusiva la boda de Norma Duval y Matthias Kühn tras trece años de relación. La artista y el empresario alemán se dieron el sí, quiero en una ceremonia civil y muy íntima celebrada en Gstaad (Suiza). Es en el país alpino donde la vedette lleva una vida tranquila, aunque viaja a España para ver a la familia. "Es una vida mucho más tranquila, mucho más relajada… Tengo mucho más tiempo para mí. También, cuando vengo, tengo una vida mucho más amplia en el sentido de que estoy con mis hijos, mi familia, el trabajo, las casas… Pero allí no, allí es relajación total. Es mi gimnasio, hago deporte… me viene muy bien, eh. Además, Matthias y yo estamos en muy momento muy bonito, muy dulce, muy contentos de habernos casado y muy felices…" aseguraba en ¡HOLA! hace unos meses.