Chino Darín está viviendo un gran momento. El actor, de 35 años, acaba de presentar en Barcelona su próxima serie, Manos de hierro, y en Málaga su nueva película como productor, Descansar en paz, que llegará a Netflix el 27 de marzo. "Estoy feliz, contento", aseguró sobre la alfombra roja del festival. "Son dos proyectos que se las traen", añadió entre risas, por eso cuando finalice la promoción de ambos cruzará el charco para relajarse. "Me voy a tomar un pequeño descanso, merecido. Vuelvo a Argentina, cierro un par de cositas y me tomo unos días de vacaciones", declaró.
- El resurgir de Hiba Abouk: presenta la serie que la salvó en el peor momento de su vida
En Manos de hierro, un thriller sobre una trama de corrupción, narcotráfico y asesinatos, comparte protagonismo con Jaime Lorente, Natalia de Molina, Eduard Fernández, Enric Auquer y Sergi López. En Descansar en paz, película basada en la novela homónima de Martín Baintrub, trabaja detrás de las cámaras con su padre, el también actor Ricardo Darín. Juntos han producido este filme protagonizado por Joaquín Furriel, Griselda Siciliani y Gabriel Goity, que lanza varias preguntas muy inquietantes al espectador: ¿Se puede desaparecer y olvidar toda una vida? ¿Se puede empezar de cero y nunca más mirar atrás?
Su éxito profesional coincide con una etapa muy dulce a nivel personal. Desde 2015 comparte su vida con Úrsula Corberó, una actriz a la que admira profundamente. "Es un orgullo compartir todo con ella", aseguró. "Nunca la he dejado de ver crecer profesionalmente, es una cosa de locos. Me encanta", añadió tras recordar que fue muy emocionante poder estar a su lado cuando se alzó con el Fotogramas de Plata por su papel de Rosa Peral en El cuerpo en llamas. Cuando los reporteros le preguntaron qué era lo mejor y lo peor de Úrsula sonrió y dijo en tono de broma: "Lo mejor de Úrsula soy yo y lo peor también".
Por motivos de trabajo, los actores pasan largas temporadas separados. "Se lleva bien, a veces se complica porque se estiran los proyectos y hace que estemos más tiempos separados, pero a mí me gusta, creo que es un incentivo para renovar la energía a la hora de verse, extrañarse un poco, tener ganas de compartir...", comentó. "Nosotros estamos un poco acostumbrados a esa dinámica, eso no significa que siempre sea positivo, ni que siempre lo lleves con soltura, a veces se te va un poco de la mano los tiempos y se empieza a complicar", reconoció.
De momento, los intérpretes no tienen previsto ningún proyecto en común, pero les gustaría. "Si se diera la oportunidad sí, sino, no vamos a rodar cualquier cosa por rodar algo juntos", declaró el actor argentino con rotundidad.
Con la misma rotundidad, aseguró que no piensa en boda con Úrsula. "¿Te ves casándote?", le dijeron. "No", respondió sin dudar. "¿Siendo papi?", insistieron. "Puede ser", contestó. "¿Adoptar también?", le plantearon. "Es lo mismo hay distintas formas de ser papi", reflexionó. Por último, le preguntaron que dónde se casaría, en España o en Argentina, y él, sin parar de reír, repitió: "Dije que no me casaría".