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La inesperada muerte de Fernando Gómez-Acebo, a los 49 años, ha dejado a su familia completamente devastada. El hijo menor de la recordada infanta doña Pilar fallecía el pasado viernes 1 de marzo, y el domingo 3 de marzo, sus hermanos y otros familiares le daban el último adiós en el cementerio de San Isidro, de Madrid, donde fue enterrado en la más estricta intimidad.
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Juan, el mayor de los hijos varones de los duques de Badajoz, acudió de la mano de su nueva pareja, Teresa Véret. Según ha podido conocer ¡HOLA!, fue Inés Gómez-Acebo quien los presentó, y, a día de hoy, viven juntos en Miami.
Teresa es arquitecta y tiene dos hijos. Ellos son el motor de su vida y su mayor inspiración a la hora de crear espacios, según desvelaba al portal Shoutout Miami, en una entrevista que concedió junto a su socia, Lisa Mishurda, en la empresa Re-Forma Architecture-LLC.
Aunque la nueva pareja de Juan Gómez-Acebo nació y creció en España, ha desarrollado gran parte de su carrera al otro lado del océano -trabajó, además de en Miami, en otras ciudades estadounidenses como Nueva York y también en Sydney-.
Una de sus grandes aficiones es viajar en barco, disfrutando del sol y del cielo azul; encontrar antigüedades en las tiendas de Miami y la gastronomía.
Juan Gómez-Acebo, el artista de la familia
Juan, por su parte, es el segundo de los cinco hijos de la infanta Pilar; y, desde bien pequeño, ya destacaba por sus dotes artísticas. “No es que sea el más artista de la familia, es que creo que es el único artista”, llegaría a decir doña Pilar en una de sus exposiciones.
Estudió Bellas Artes en la Universidad Rollins de Orlando, y sus obras han sido expuestas en España -algunas se pueden encontrar en la Biblioteca Nacional de España o la Fundación Arauco- y en otros países -desde Luxemburgo a Portugal-.
En 2013, Juan -que también es compositor musical- tuvo un hijo, Nicolás, fruto de su relación con Winston Holmes Carney , con quien se casaría unos meses después en una íntima boda celebrada en el consulado español de Miami. Sin embargo, cinco años después de darse el ‘sí, quiero’, en 2019, el matrimonio llegaría a su fin.
Juan decidió entonces quedarse en la ciudad estadounidense para estar cerca de su pequeño, que se llama igual que su primo Nicolás, el hijo de Fernando Gómez-Acebo.