En la vida, siempre hay que celebrar las cosas buenas y a Gisela motivos no le faltan, sobre todo después de los duros momentos que ha atravesado, para alcanzar su sueño de quedarse embarazada. Ahora, cuando faltan dos meses para que por fin pueda tener a su deseado bebé en brazos, la cantante y su pareja, José Ángel Ortega, han reunido a muchos de sus grandes amigos en Madrid, para brindar con ellos por la próxima llegada de su primer hijo, en una divertida baby shower en la que también han revelado el sexo de su bebé.
“¡Es un niño! Estamos con muchas ganas. Hasta que no ha llegado el día de hoy, como he pasado por tantas cosas, no me lo creía. Me ha costado ilusionarme”
Como no podía ser de otra manera, hubo música y muchos de sus compañeros de la primera edición de Operación Triunfo, que con el paso de los años se han convertido en su segunda familia. Natalia, Geno y Chenoa, quien ahora es la presentadora del talent musical en el que se conocieron, fueron las primeras en aparecer en el atelier de Ramón Freixa junto con Alejandro Parreño, recién llegado de Valencia.
Todos se fundieron en abrazos con Gisela y José, sin poder ocultar su emoción al tocar con cariño la tripita de su gran amiga. Después llegó Manu Tenorio y no faltaron las risas, canciones y bromas entre ellos porque, aunque sus vidas y carreras hayan tomado rumbos distintos, siguen manteniendo intacta su amistad. Tan solo faltaron algunos amigos de la academia con los que Gisela sigue manteniendo una estrecha relación, como Rosa López, Nuria Fergó y Naím Thomas, que no pudieron asistir por diferentes compromisos profesionales y personales. Además, estuvieron entre los invitados Elsa Anka, acompañada por su nieta, Elsa; el estilista Alberto Cerdán, la diseñadora Piedad Rodríguez y la actriz Clara Alvarado, entre otros.
Llegar hasta este punto ha sido un camino complicado física y emocionalmente, como la propia Gisela, de 44 años, nos explicaba en páginas de ¡HOLA!, cuando nos anunció su embarazo. Ha sido “una carrera de fondo”, tras cinco años intentando quedarse embarazada y enfrentarse a dos abortos por el camino, pero finalmente, en agosto, tuvo la confirmación de que su deseo de ser madre se haría realidad, tras un proceso de fecundación in vitro. Los meses siguientes tampoco han sido fáciles, ya que tuvo un desprendimiento del saco gestacional —que le obligó a estar dos meses en la cama— y además, el pasado mes de diciembre, estuvo ingresada por un cólico nefrítico que le ha dejado secuelas. Pero, a pesar de todo, su sonrisa no se borra, porque pronto tendrá a su bebé en brazos y todos los esfuerzos habrán valido la pena y los baches del camino quedarán atrás. A su lado, siendo su faro, su protector y estando siempre muy pendiente, ha estado José quien, al igual que ella, está muy ilusionado y algo nervioso en esta cuenta atrás, que pronto llegará a su fin. Así nos lo contaba entusiasmada la cantante, antes de recibir a los invitados de su baby shower.
“Los compañeros de ‘Operación Triunfo’ con los que no cuesta mantener la amistad son los que están aquí y siempre me apoyan. Aunque algunos querían venir, pero no han podido como Rosa, Nuria Fergó y Naím”
—Gisela, ¿cómo estás llevando la recta final?
—Pues, si te digo la verdad, regular a nivel físico porque lo del cólico nefrítico que tuve en diciembre me ha dejado secuelas. Llevo un catéter interno para evitar que se vuelva a repetir el cólico, porque no pude expulsar la piedra y es muy molesto, muy incapacitante y doloroso. No tengo opciones de poder quitarme el catéter de ninguna manera, porque es más peligroso quitarlo que llevarlo, y los médicos me han dicho que tengo que aguantar hasta que nazca el bebé. Entonces, la idea que yo tenía de embarazo no está siendo así, pero lo importante es que vamos adelante.
—Ya te queda menos, ¿cuánto te falta?
—Dos meses.
—Eso pasa volando, luego se te olvidarán los momentos malos.
—Sí, la gente me dice que intente no pensar, pero es que es dolor físico diario, día y noche. Entonces es complicado no pensarlo y quitártelo de la cabeza. Pero tengo que decir que soy positiva, eso sí.
—Se te ve con una sonrisa. Hay que ser positivo y, además, hoy toca celebrar y revelar el sexo de tu bebé. ¿Es niño o niña?
—¡Estamos esperando un niño! Estamos con muchas ganas. Hasta que no ha llegado el día de hoy, como he pasado por tantas cosas, no me lo creía. Me ha costado ilusionarme, pero por fin he llegado aquí y hoy he visto todo el montaje de la fiesta, la implicación tanto de la agencia como del atelier de Ramón Freixa y su equipo, y ver cómo lo está haciendo todo el mundo con tanto amor, cariño y tan bonito es algo que me emociona.
—Así que hoy ya eres más consciente de que vas a ser mamá…
—Parece que sí, parece que va a ser real, ¿no? Con lo que me ha costado y no solamente los meses de embarazo en sí, sino también quedarme embarazada... Ha sido un previo muy duro, ha sido todo un camino tan complicado, que no acabas de creerlo.
“Los dos estamos nerviosos. Somos primerizos en todo y, ante lo desconocido, siempre te entra un poquillo de miedo y de respeto, porque el embarazo ha sido un proceso bastante vertiginoso”
Sus grandes amigos de la academia
—Ahora vendrán muchos amigos tuyos. ¿Han podido venir todos, o echarás de menos a alguien?
—Faltan algunos porque claro, es complicado que todo el mundo pueda coincidir, porque las agendas son complicadísimas. Pero vienen los que más quiero. Al menos de los amigos que tengo aquí en Madrid y también se han desplazado algunas personas de fuera. No han podido viajar todos los de fuera, pero quizá más adelante celebre con ellos en petit comité, aunque hoy se junta un buen grupo de personas a las que quiero mucho.
—¿Qué es para ti la amistad?
—Es estar en los buenos y en los malos momentos. Es confiar, es poder compartir, es poder llorar juntos, es reír. Es tener confidencias, ayudar y apoyar.
—Vienen muchos compañeros de Operación Triunfo. ¿Os ha costado seguir manteniendo vuestra amistad? Porque vuestras carreras han seguido diferentes caminos y vuestras vidas también.
—Con los que cuesta es porque ya no son tan amigos.
—Pasa en todos los grupos de amigos.
—Con los que no cuesta son los que están aquí, los que vienen a apoyarme. Algunos han querido venir, pero no ha podido ser por sus agendas, que esto también tengo que decirlo, como Rosa, Nuria Fergó o Naím Thomas, que los invité y han estado intentando mover mil cosas, pero al final les ha resultado imposible. Les echaremos de menos.
—¿Es posible que en el futuro volváis a hacer un reencuentro con gira de conciertos, como la que hicisteis en 2016?
—Creo que no. Aunque también pensaba que no se podría hacer ese reencuentro para celebrar los quince años de nuestra entrada en la Academia de Operación Triunfo. Pensé que no nos íbamos a juntar todos ni de broma, pero al final se hizo. Pero, en esta ocasión, yo creo que no porque ya bastantes cosas pasaron en ese reencuentro, algunos ya salieron como un poco escarmentados. Tal y como han ido las vidas de algunos, no conseguiríamos que algunas personas volvieran a juntarse. Pero ¿quién sabe? Ojalá sucediera. Yo sería feliz. Estaría encantada porque no tengo ningún problema con nadie.
Preparándose para la llegada de su primer hijo
—¿Cantas mucho a tu bebé?
—Sí, por ahora sí canto mucho porque he seguido trabajando, así que se ha “comido” un montón de actuaciones mías y de escenarios. Cuando oye ciertas canciones, no veas cómo se mueve. Es una sensación muy especial estar ahí cantando y, de repente, notar que se mueve tu bebé en la tripa, es como ¡wow!. No tengo palabras.
—Eso es que le va gustando la música.
—Es movido, es movido.
—Este año celebras nueve años con tu pareja. ¿Qué balance haces de este tiempo?
—El balance es bueno, muy positivo. Hemos tenido momentos de todo, como todas las parejas, y en nueve años pasan muchas cosas. Pero al final hacemos equipo, nos queremos, nos respetamos, que es lo más importante, y nos apoyamos y hacemos de cojín en el que apoyarse. Y la verdad es que en este proceso del embarazo, que lo estoy pasando un poquito regular, él está muy pendiente de mí, cuidándome mucho, protegiéndome y eso es lo importante para mí.
—¿Lo ves nervioso?
—Sí. Los dos estamos nerviosos. Somos primerizos en todo y, ante lo desconocido, siempre te entra un poquillo de miedo y de respeto. Respeto por la nueva situación, porque ha sido un proceso bastante vertiginoso y ahí estamos, lidiando y centrándonos mucho en el presente, sin pensar mucho más allá y en el día a día, vamos muy de la mano.
“Tal y como han ido las vidas de algunos compañeros, no creo que pudiéramos hacer un reencuentro como el de los quince años de OT. Pero ¿quién sabe? Ojalá. Yo sería feliz”
—¿Te estás preparando ya para el momento del parto? ¿Estás leyendo muchos libros?
—Sí. Tengo diez mil millones de libros de pediatras y matronas. Además, hay un montón de perfiles de chicas, sobre todo que se dedican al mundo de la maternidad y lactancia, que me han mandado un montón de libros. Así que nada, no me va a faltar información sobre el parto, la lactancia y la alimentación. También me han regalado juegos de diferentes tipos de estímulos para los bebés. Hay un mundo sobre estos temas, no sé si me dará tiempo a estudiar todo (ríe).
—Es que, a día de hoy, hay una cantidad de información infinita sobre la maternidad y educación.
—Al final creo que confiaré también mucho en mi intuición, aunque siempre va a estar muy bien tener la experiencia de los demás, las guías y todo porque de todo se aprende.
—¿Habéis pensado cómo se llamará vuestro hijo?
—Todavía no lo tenemos claro, todavía estamos decidiéndolo.
—¿Habéis hecho cada uno vuestra lista de nombres favoritos?
—Un poco sí. Vamos aportando cada uno el que nos gusta y ya veremos un poquito más adelante por cuál nos decidimos.