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Tras su comienzo el pasado julio, en Gran Bretaña, Brad Pitt continúa el rodaje de la película que protagoniza y produce —junto a Lewis Hamilton— sobre la Fórmula 1. La producción ha trasladado estos días el set a Daytona, coincidiendo con la celebración en el famoso circuito de Florida de la Rolex 24, una de las carreras más importantes de la Nascar Cup Series, el pasado fin de semana, por lo que se espera que hayan grabado algunas tomas reales.
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Los días previos, el actor y su equipo se dejaban ver en una lavandería de la zona para filmar otras escenas en las que también participa Javier Bardem. Y en los descansos del rodaje se pudo ver la buena sintonía y las risas entre ambos intérpretes, que ya trabajaron juntos, hace doce años, en El consejero, de Ridley Scott, donde también participaba Penélope Cruz. Su amistad viene de lejos y la pareja española, ambos ganadores del Oscar, pertenecen desde hace años a la gran familia de Hollywood. Por ejemplo, cuando Penélope ganó el Oscar, en 2009, por Vicky Cristina Barcelona, Brad Pitt se la ‘jugaba’ también en el entonces Kodak Theatre (hoy Dolby) nominado por El curioso caso de Benjamin Button.
En la cinta que los ha vuelto a unir —aún sin título definitivo—, esta vez a las órdenes de Joseph Kosinski, director del taquillazo Top Gun: Maverick, Pitt da vida Sonny Hayes, un piloto de F1 que se retira tras sufrir un aparatoso accidente en la década de los 90. Bardem interpreta a su amigo y dueño de una escudería en apuros que intenta sacarlo de su retiro para que vuelva a las pistas y sea mentor de la joven promesa Joshua Pearce (Damson Idris) en el equipo Apex Grand Prix (APXGP).