La vida de Susanna Griso cambió de forma radical a finales de 2020. En ese momento, la presentadora de Espejo Público ponía fin a su matrimonio con el también periodista Carles Torra, padre de sus tres hijos, Jan (2003), Mireia (2005) y Dorcette, la niña de Costa de Marfil que adoptaron en 2018. Estuvieron juntos 27 años, 23 de ellos casados, y lo que más miedo le daba a la periodista era que su hija Mireia, que entonces estaba estudiando en Irlanda, se enterara por la prensa de lo sucedido.
"Yo intenté ser muy discreta, lo sabían muy pocas personas de mi entorno y aun así la noticia salió el 24 de diciembre en una portada de una revista, que yo ese día me iba a Barcelona y que no había dicho nada a mi familia política, no les habíamos dicho nada porque estábamos esperando a comunicar la noticia y fue durísimo que se entererasen de esa manera, pero bueno, con Mireia luego encontramos el momento y Jan me dijo algo que me ayudó muchísmo: 'No pasa nada, ahora vamos a tener la mejor versión de cada uno de vosotros'", ha recordado en Dramma Queen, el podcast de Pilar Vidal en ABC.
Tras sincerarse sobre su divorcio, Susanna ha contado entre risas que a lo largo de su vida ha "ligado muy poco". "Yo siempre he sido de relaciones batantes largas, incluso antes de casarme yo decía ahora no me quiero comprometer, no quiero estar con nadie, quiero vivir la vida y no sé porqué siempre me acababa liando", ha dicho. Después, ha añadido: "Yo el aquí te pillo aquí te mato no lo practico. Yo necesito mucho amor, mucho cariño. En el fondo soy muy tierna. No soy capaz de desvincular el sexo del amor, para mí siempre irán cogidos de la mano. Creo que esto tiene mucho que ver con nuestra propia educacion, pero yo soy así".
La presentadora siempre ha huido de aquellos hombres que se acercaban a ella por salir en televisión. "No hay nada que me espante más que eso, para mí es un bajón de líbido total, cero, al revés, a mí me resulta atractivo que la persona en cuestión casi ni me haya visto o que no tenga ningún interés en lo que hago, porque sino no sabes si hay un punto de mitomanía y lo último que querría yo es ser un trofeo de alguien", ha asegurado.
Afortunadamente, Susanna ha encontrado al hombre perfecto: el empresario Íñigo Afán de Ribera. Comenzaron a salir en septiembre de 2022 y desde entonces la periodista está viviendo uno de los mejores momentos de su vida. "Toda edad tiene unas experiencias distintas. Hay un momento en el que buscas un compañero de viaje y el padre de tus hijos, pero ahora, que ya tengo mi vida muy hecha y mis hijos encaminados, lo que busco es vivir y vivir cierta aventura, me apetece divertirme, recuperar el tiempo perdido, salir, viajar, conocer gente distinta y estar con alguien muy diferente a mí también me parece muy atractivo", ha dicho.
Su novio es tan "aventurero" que se refiere a él como Indiana Jones. "Es una persona que ha viajado durante muchos años por el mundo y por eso está muy desconectado de todo, de mi propio mundo también, tiene un interés relativo en lo que yo hago y eso me gusta, me divierte, porque al final, todo lo que a mí me saque de lo que yo hago y donde yo no sea el centro, eso es maravilloso", ha finalizado con una gran sonrisa.