Cristina Pedroche y David Muñoz han arrancado 2024 con una gran celebración. El mejor cocinero del mundo ha cumplido 44 años y ha soplado las velas de su tarta en StreetXO. "Feliz cumpleaños al amor de mi vida en versión adulta", ha escrito la presentadora junto a esta foto en la que aparecen abrazados. "Qué suerte tuvimos de encontrarnos y de mirarnos de verdad. Marido, me haces mejor y no se me ocurre mejor compañero de aventuras que tú, sea la que sea. Hoy es tu cumpleaños, pero el regalo lo tengo yo todos los días. Te amo. Te amamos", ha añadido totalmente enamorada.
A esta romántica felicitación, se suma esta otra. Al inicio de Zapeando, Cristina ha felicitado a su compañero Iñaki Urritia y ha confesado que siempre se acordaba de su cumpleaños porque era el 14 de enero, un día antes que el de su marido. Inmediatamente después, ha mirado a cámara diciendo: "Felicidades, marido. Te quiero". Además, ha lanzado un beso al aire como prueba del profundo amor que siente por el cocinero, con quien se casó el 24 de octubre de 2015.
Tras su paso por la tele, la presentadora se ha reunido de nuevo con su marido, a quien se ha comido literalmente a besos. Ante tanta efusividad, el chef le ha dedicado estas bonitas palabras a su mujer: "Qué absoluta fantasía de compañera de vida tengo, la felicidad en su máxima expresión".
Cristina ha disfrutado al máximo de esta celebración tras las críticas recibidas por las campanadas. "Me han dado por todos lados", confesó días después. La presentadora decidió entonces reducir sus publicaciones en redes sociales, pues su propósito para este año es cuidar su salud mental alejándose de lo que le hace daño y disfrutando más de lo que le da paz. "Voy a ir dando las cosas en pequeñas píldoras, no todo a la vez", dijo al hablar del espectacular vestido que lució el pasado 31 de diciembre.
La madrileña ya contó en ¡HOLA! que no tenía fuerzas para lidiar con ciertos comentarios, sobre todo, si van dirigidos a su pequeña Laia, que vino al mundo hace seis meses. "Ante las críticas, ahora desaparezco más de las redes porque no estoy bien. Mi corazón y mi armadura ahora no son tan fuertes como antes, no son tan duros. La armadura es más permeable, algunas cosas la atraviesan y me duele. Me duele y por eso no enseño a la niña y por eso la protejo de todo el odio y todo el dolor que siento cuando leo ciertas cosas", declaró.