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El pasado 3 de enero, Michael Schumacher cumplía 55 años, justo una década después del fatídico accidente que sufrió en la estación de Méribel -en los Alpes franceses- mientras practicaba esquí. El casco se rompió y su cerebro quedó tan dañado que, según el neurocirujano Erich Riederer, "el deportista se encuentra en estado vegetativo". Así lo revela él mismo en el documental Michael Schumacher, en busca de la verdad. El siete veces campeón el mundo permanece aislado, desde entonces, y acceder a su inexpugnables mansiones, tanto en la ciudad suiza de Gland como en la mallorquina de Andratx, resulta misión imposible. Dos mujeres velan para proteger su vida y su imagen. Por un lado, su esposa Corinna Betsch, de 54 años. Y por otro, su manager Sabine Kehm, de 60 años, que también es la representante de su hijo Mick. Dale al play y conoce a las dos mujeres que blindan a cal y canto la imagen de Michael Schumacher.
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