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Eva Nasarre, la profesora de aeróbic que puso en forma a una generación con su programa Puesta a punto, se alejó de la televisión después de haber alcanzado un gran éxito en los años 80. Más de tres décadas después de llegar a la fama, la monitora catalana, de 63 años, ha reaparecido después de conocerse que sufre una enfermedad autoinmune para la que no existe cura y que le ha cambiado la vida de forma radical. Años atrás fue diagnosticada de artritis reumatoide grave y desde entonces dedica su tiempo a luchar por la defensa de los derechos de las personas con dependencia y discapacidad.
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© RTVELa exentrenadora de Lleida ha compartido a través de su cuenta de X (antes Twitter) una serie de reflexiones sobre su situación. "Acabo el año muy cansada. En cada lucha por unos cuidados dignos, se va una energía que necesito mucho para mí, por mi situación de enferma crónica, con discapacidad y dependencia. No tengo ninguna esperanza en que los cuidados mejoren. Ninguna", lamentaba. Nasarre arrastra las secuelas de este trastorno crónico y degenerativo. Su enfermedad le provoca que sus articulaciones se inflamen de tal modo que le provoca un intenso dolor, rigidez, inflamación, pérdida de movilidad y dependencia.
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La expresentadora de la televisión lucha desde entonces por la defensa de la ley de Dependencia y a través de las redes sociales reivindica sus ideas y, a su vez, ha querido mostrar su más sincero agradecimiento a las personas dedicadas al cuidado de los enfermos dependientes. "Gracias a las señoras que limpian y cuidan... Con salarios bajos y condiciones laborales precarias. Invisibles para muchos. Todo mi respeto para ellas", añadió en referencia a todas aquellas personas que cada día le ayudan a sobrellevar su enfermedad. "Para el 2024 pido estabilidad en el servicio de ayuda a domicilio, sin cambios de horarios ni de auxiliares que tanto nos desestabiliza a los usuarios. Pido más personal en las residencias y mejores condiciones de trabajo y sueldos dignos para quienes nos cuidan", defiende.
© GtresonlineDespués de alejarse de la televisión en 1986, Eva Nasarre decidió estudiar Trabajos Sociales en la Universidad de Barcelona y se convirtió en trabajadora social. Se casó en segundas nupcias con Chema Álvarez, con quien terminó su matrimonio en 1998 y fruto de su unión nació su hijo, Joan Marc, de 37 años, que a su vez es padre de una niña junto a su pareja, la primera nieta de la expresentadora. Poco después de su separación le diagnosticaron esta enfermedad degenerativa, de la que se ha convertido en gran activista y defensora de los derechos de las personas con discapacidad.
