Después de tres meses repletos de tensión, diversión, enfrentamientos y muchas emociones, Naomi Asensi se proclamó ayer la ganadora de la octava edición de 'Gran Hermano VIP', venciendo a Luitingo, que quedó finalmente en segunda posición, con más del 57% de los votos y recibiendo el codiciado maletín a manos de la ganadora del pasado año, Adara Molinero.
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La concursante ha contado durante todo el concurso del apoyo incondicional por parte de la audiencia. Cabe recordar que Naomi entró cuando el concurso ya llevaba varias semanas en emisión, por lo que sus comienzos no fueron fáciles, sin embargo el público la eligió por votación para que se convirtiera finalmente “concursante de pleno derecho”, lo que le dio el impulso necesario para mostrar su carácter y personalidad durante todo el reality. “Perdón por pensar que no había nadie entendiéndome”, declaró emocionada.
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Todo hacía prever que Luitingo acabaría siendo el ganador, incluso la misma Naomi aseguró en la final que los rumores acerca de la posible relación de éste con Jessica Bueno le hacían pensar que él era el favorito para ganar. “Esta final no es solo ‘Me encanta Jenni’, también estoy yo”, manifestó enfadada en la entrevista con Marta Flitch.
Durante su estancia en la casa, Naomi ha sembrado varias polémicas que desembocaron en dos bandos declarados: los que estaban en contra y los que la apoyaban en todas sus posturas, llegando incluso a separar por completo al "Team Naranja", ya que su amistad con Laura Bozzo ha pasado por distintos altibajos.
Para Naomi, su paso por el reality ha significado mucho más que estas semanas en la casa de Guadalix le han servido para superar la ruptura sentimental con Adrián Blanch. Conocimos a la pareja en su paso por La isla de las tentaciones y tras retomar su relación meses después del programa, en agosto de este año era la propia Naomi la que anunciaba su ruptura definitiva. Ahora parece que este tiempo aislada le ha servido para coger impulso y empezar de nuevo. "Estar aquí (la casa de Gran Hermano VIP) me ha ayudado a ser menos vulnerable y volver a tener ganas de comerme el mundo", finalizó.