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Desde que saltó a fama en 1991 con su canción Pisando Fuerte, Alejandro Sanz ha sido un conquistador. Tanto sobre el escenario, como fuera de ellos, porque el cantante madrileño se ha convertido en un ídolo para el gran público. Especialmente, el femenino. Un éxito en las mujeres que también se ha visto reflejado en su currículum sentimental. De hecho, en los últimos 25 años, Alejandro no ha pasado mucho tiempo soltero: ha compartido vida sentimental con la modelo mexicana Jaydy Michel, la fotógrafa portorriqueña Valeria Rivera, la psicóloga Raquel Perera y la artista cubana Rachel Valdés. Con esta última terminó su relación el pasado mes de junio, después de más de tres años juntos y a pocos días después de que el propio cantante confesara que atravesaba un bache emocional.
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Seis meses después de esta ruptura, parece que ha encontrado tiritas para su c’orazón partío’. No cabe duda de que gran parte de la inyección de energía se la han transmitido sus fans, con los que lleva reencontrándose en la gira de conciertos que inició el pasado 9 de febrero en México y que culminó el pasado viernes 15 en Madrid. Pero también ha recibido apoyos de sus amistades. Una de sus más desconocidas y también más especiales es la que comparte Mónica Cruz.
Según ha podido saber ¡HOLA!, el cantante ha experimentado un acercamiento con la actriz de Un paso adelante, también hermana de Penélope Cruz. Su amistad se estrechó a lo largo de este verano, aunque ambos han conseguido que sus encuentros hayan pasado desapercibidos. No ha habido documentación gráfica de sus citas, ya que se han encargado de verse en lugares privados o con amigos, para no despertar ninguna sospecha.
Por ejemplo, Mónica acudió a varios conciertos que Alejandro ofreció en verano. “Me flipa en directo”, ha confesado la actriz y bailarina del intérprete de canciones como Y si fuera ella, Mi persona favorita o Si tú me miras. Igualmente, se vieron el pasado noviembre en Sevilla, durante la celebración de los Latin Grammy, o en la fiesta de cumpleaños que el cantante organizó este pasado martes 19 en Madrid para celebrar sus 55 años.
Por otro lado, también hemos podido saber que ambos también se han visto fuera de los escenarios y también en la costa cántabra, donde han podido verse en verano sin llamar la atención. A mediados septiembre, se produjo un distanciamiento entre ellos, pero de tipo físico, ya que Alejandro ofreció una serie de conciertos en Norteamérica –el 16 de septiembre, en Puerto Rico– que a finales de octubre. Aunque este distanciamiento físico pudo haber enfriado su amistad, lo cierto es que sus posturas se han acercado todas estas semanas y que ambos se encuentran ilusionados.
La discreción con la que Mónica y Alejandro han llevado sus encuentros es la misma que han demostrado en sus movimientos virtuales. A lo largo de este medio años, apenas ha habido más interacción en las redes que escasos me gusta. Sólo ha sido el cantante quien le ha dejado un mensaje a la vista de todos y ha sido el 17 de septiembre desde América: “Tan bella”, le escribió en Instagram, dejándole también un emoji en forma de corazón.
Curiosamente, Mónica también ha interactuado en Instagram con Manuela, la hija que el cantante tuvo con Jaydy Michel. De hecho, ella le suele dejar cariñosos mensajes a la hermana de Penélope. Ambas se siguen mutuamente, al igual que Mónica y Alexander, el segundo hijo del artista. Cabe señalar que Alejandro Sanz ha contado con la compañía de sus dos hijos a lo largo de toda su gira veraniega por España.
Al igual que Alejandro Sanz, Mónica Cruz ha vivido varios noviazgos mediáticos. De Miguel Ángel Muñoz se enamoró en 2002, durante las grabaciones de la serie Un paso adelante. Su relación terminó en 2004, aunque la amistad entre ambos ha prevalecido. Un año después, la hermana de Penélope empezó a salir con otro compañero en la misma serie de Antena 3. Concretamente, con Fabián Mazzei Ronna, quien interpretaba al profesor de teatro. Ya entre 2006 y 2007, la actriz compartió vida sentimental con un italiano, especialista en escenas de riesgo llamado Paolo y que conoció en el rodaje de En busca de la tumba de Cristo.
La última pareja conocida de Mónica la mantuvo con Alex González en 2010, con el que rompió a finales del año siguiente. Eso quiere decir que, desde hace doce, no se le conoce ninguna pareja a la actriz. De hecho, en 2013 fue madre de una niña, un deseo que cumplió mediante reproducción asistida. ‘’Yo siempre lo he tenido claro: no me iba a arriesgar a esperar a que apareciera el compañero adecuado para cumplir mi sueño y que, cuando éste llegara, a mí se me hubiera hecho tarde. ¡Me habría convertido en la mujer más infeliz del mundo!’’, confesó en una entrevista poco antes de dar a luz.
Por su parte, Alejandro conoció a Jaydy Michel en casa del director de orquesta Luis Cobos y no tardaron en casarse: como ya adelantó ¡HOLA!, la boda se celebró en secreto en Bali el 30 de diciembre de 1999 en Bali. El matrimonio, que tuvo una hija en verano de 2001, se terminó en julio de 2005. Alejandro también mantuvo una relación con la fotógrafa portorriqueña Valeria Rivera, con quien volvió a ser padre en julio de 2003. Sin embargo, la existencia de este hijo, llamado Alexander, no se descubrió hasta 2006.
En 2012, el artista se volvió a casar y lo hizo por sorpresa, con la psicóloga Raquel Perera , tras más de cinco años de noviazgo. Fruto de su matrimonio nacieron Dylan, en julio de 2011, y Alma en julio de 2014. Alejandro y Raquel Perera se separaron en 2020 y ese mismo año, el cantante rehizo su vida sentimental con la artista cubana Rachel Valdés, con quien rompió a mediados de este 2023.