Hace algo más de un año que Eva González y Cayetano Rivera pusieron fin a su matrimonio y, desde entonces, ella vive volcada en su único hijo Cayetano, en su familia y, por supuesto, en el mundo de la televisión, su gran pasión. Así, este pasado fin de semana, la sevillana era fotografiada llegando de la mano del verdadero “hombrecito” de su vida a la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, en Mairena del Alcor (su tierra natal), donde asistieron al bautizo de la pequeña Alejandra, hija de su prima Mercedes.
En su año más difícil, Eva está intentando dejar atrás su historia de amor fallida, sin plantearse enamorarse de nuevo. “No es una prioridad en mi vida, disfrutando de la soltería se está estupendamente”, afirmaba en una de sus últimas apariciones la presentadora, que está triunfando una temporada más al frente de La Voz.