Sus números abruman. Con quince millones de seguidores en ‘TikTok’ y más de dos millones en ‘Instagram’, Mar Lucas está considerada como una de las ‘reinas’ de las redes en nuestro país. Comenzó cuando era tan sólo una adolescente, subiendo vídeos a ‘Musica.ly’ -la antigua ‘TikTok’- y hoy, con veintiuno, puede decir que es una estrella más que consolidada en el mundo digital. Pero ella, en realidad, ahora persigue otro sueño: triunfar en la música .
Con la sinceridad y naturalidad que la caracterizan, reconoce que, más allá de la popularidad que le ha dado el universo digital, quitarse la etiqueta de influencer no es fácil: “Me costó mucho que la gente de la industria creyera en mí”. Sin embargo, esta joven nacida en Sitges, al sudoeste de Barcelona, tiene claro que cantar es su gran pasión, y confía en que, con esfuerzo y mucho trabajo, todo se puede lograr.
- ¿Qué se siente al tener tantos millones de seguidores en redes sociales?
- La verdad es que yo me siento exactamente igual. Mi vida ha cambiado, pero es cierto que hace muchos años que esto forma parte de mí. Intento no pensar que son personas reales porque me da un poco de vértigo.
- Empezaste en esto con tan sólo 14 años… en la antigua plataforma de ‘TikTok’, ‘Musica.ly’
- Bueno, en realidad, me descargué ‘Instagram’ y ‘Musica.ly’ como con doce o trece años. Me los descargué porque los vi en la ‘App Store’, y dije: ‘Voy a probar a ver qué es esto’. Yo no tenía ni teléfono. Estaba con mi ‘tablet’, me descargaba juegos, tenía mis cosas… y cuando me descargué estas dos aplicaciones me divertía mucho con ellas. En ‘Instagram’, los primeros años no subía nada porque no quería enseñar mi cara, pero luego ya, con catorce, comencé a grabar más y me enganché. Cuando terminaba el cole, comía algo, hacía los deberes rápido, estudiaba un poco, y me arreglaba, me maquillaba para experimentar un poco haciendo vídeos en ‘Musica.ly’. También lo hacía antes de salir con mis amigos.
- No te esperabas entonces tener tanto éxito en la red
- ¡Para nada! Yo lo hacía por diversión, como un hobby. Jamás me hubiera imaginado que todo esto hubiese pasado.
- Has dicho en más de una ocasión que ser de un sitio como Sitges te ha ayudado a mantener los pies en la tierra… Que tu familia y tus amigos son tu mejor apoyo
- Sí. Yo tengo a mis amigos de toda la vida, del pueblo; y también a mi familia. Creo que ellos son los que me hacen mantener los pies sobre la tierra, y ver la realidad, lo que es una vida ‘normal’. Lo que cuesta conseguir las cosas, el esfuerzo que supone, y la suerte que tengo de trabajar en algo que me gusta.
“Creo que mi familia y mis amigos son los que me hacen mantener los pies sobre la tierra y ver la realidad, lo que es una vida ‘normal’ y lo que cuesta conseguir las cosas”
- Con tantos seguidores, ¿sientes mucha presión en tu salto a la música?
- Sí, la verdad es que sí. Cada vez la presión es más grande. Es como que pierdes un poco el norte, como que tu realidad es otra totalmente distinta a la de los demás. Empiezas a creer que hay cosas, que tú consideras normales, que no lo son. Entonces, que gente que tiene una vida ‘normal’ te cuente cómo es, lo que sufren, lo que cuesta conseguir las cosas… hace que digas: ‘Wow, sí que tengo mucha suerte y lo que me está pasando es algo maravilloso’.
- Has pasado de ser creadora de contenido a dar el salto a la música. No te habías dedicado nunca a ello profesionalmente, ¿no? De hecho, has dicho en alguna entrevista que eras de las que cantabas en la ducha hasta que alguien te dijo que tenías un timbre de voz muy bonito…
- Sí, fue exactamente así. En la vida me hubiese imaginado que yo me hubiese podido dedicar a cantar. Yo ya me ponía el límite: ‘yo no he nacido para esto, no tengo un talento innato como Arianna Grande…’ Para mí era algo imposible. Nunca lo tuve como opción, pero, cuando se me dio la oportunidad y conocí lo que era el mundo de la música, me enamoré por completo y trabajé lo más duro para poder dedicarme a ello y poder hacer que formara parte de mi día a día, de mis metas… porque de verdad que me hace muy feliz.
- ¿Ha sido difícil el salto? Aunque lleves un largo recorrido en internet, has hecho un cambio total. ¿Crees que el ser influencer antes ha sido una carga?
- En parte, creo que, obviamente, tiene un punto de ayuda, por reconocimiento y porque te ve más gente. Pero también creo que es un poco controversial porque la gente te tiene etiquetada de una manera, y quitarte esa etiqueta o que te puedan ver de otra forma… También cuesta muchísimo ganar credibilidad en la música u otro aspecto que sea artístico porque, como creador de contenido, muchas veces no te toman en serio. Que te tomen en serio en un mundo como la música es algo que me ha costado como dos o tres años, y aún me queda mucho camino por recorrer, mucho que aprender… y, al final, creo que a la gente le cuesta entender que estoy empezando, poco a poco, que no tengo ninguna prisa… Puede haber un caso en el que, de repente, un artista tiene un talento innato y le va la carrera increíble… Pero, normalmente, los artistas tardan muchísimos años en encontrar su sonido, su voz, su identidad en las canciones que hacen. Son cosas que llevan mucho tiempo. Eso fue lo que a mí más me costó. Dentro de lo que cabe, yo tardé dos años en ver lo que quería hacer, en encontrar mi sonido, mi voz… aprender cómo funcionaba la industria de la música, conseguir un equipo que creyera en mí, un montón de cosas… A partir de ahí, me lancé. Quiero que la gente me vea desde el principio, y que los que de verdad me quieran sigan mi camino, poco a poco iré aprendiendo y subiendo. Creo que, de primeras, todo el mundo espera que saques una canción y seas como los artistas que llevan catorce años en la música. Y es un error. Pienso que muy poca gente empieza así, se debería juzgar un poco menos y entender que se puede aprender, que simplemente con disciplina y con trabajo puedes conseguir lo que quieras. Pero que hay que tener un poco más de calma con la gente que está empezando, y con los creadores de contenido, no cerrarlos ya en: ‘tú eres creadora de contenido, tienes que dedicarte a hacer fotos, subir vídeos y ya está…’ Pues no. Si me pongo a tomar clases de interpretación, a lo mejor al principio no lo hago muy bien, pero si tengo una disciplina y de verdad quiero hacerlo, sigo, persisto, practico todos los días… Al final voy a ser un actor increíble… o quizá no, pero por lo menos que me dejen la oportunidad de intentarlo y de soñarlo.
“Como creador de contenido, muchas veces, no te toman en serio... Hay que tener un poco más de calma con la gente que está empezando”
- Pese a todo… ¿estás contenta con tu decisión?
- Sí, cien por cien. Al principio me costó sufrir bastante porque se dice pronto, pero han sido dos años de no saber muy bien si me estaba arriesgando, deciándole mucho tiempo y también dinero a algo que no iba a funcionar… Era como un sueño, pero no sabía qué era lo que iba a pasar. Me daba mucho miedo arriesgarme y me costó mucho encontrar un equipo que confiara, que la gente de la industria que creyera en mí… Como que todo es un proceso muy largo, tuve muchos bajones, de querer tirar la toalla y me dije… ‘Oye, ¿y si me dedico simplemente a crear contenido?’ Era lo que me resultaba más fácil porque tenía muchos años de recorrido, una base sólida y yo podía seguir perfectamente haciendo eso, dejar a un lado todo. Pero, realmente, lo que me llenaba y me hacía feliz era la música, entonces me arriesgué. Estoy muy feliz de mi decisión y de no haberme rendido porque a día de hoy creo que estoy recogiendo muchos frutos, la gente está creyendo, me está yendo bien… y estoy cumpliendo muchos sueños. Ha sido increíble.
- ¿Tú notas esa evolución?
- Muchísimo. Y al principio no tenía ni idea, yo lo hacía porque me divertía el proceso de crear una canción, contar una historia, un mensaje con melodías e hilar toda esa historia a cada acorde, a cada melodía… que todo tuviese un sentido. A mí me hacía mucha ilusión llegar al estudio y decir: ‘Oye, a ver hoy de qué hablamos y cómo me siento’, interiorizar tanto en mí… y crear. Yo hacía poesía antes, así que hacerlo dentro de una canción para mí era increíble, ¿no? Y me hacía muy feliz. Me queda muchísimo por aprender, por mejorar cada día, intento cada día trabajar mucho para sonar un poquito mejor.
- Además has colaborado con artistas como Juan Magán…
- He tenido la oportunidad de trabajar con artistas que llevan muchos años, que tienen un talento increíble y me han dado muchísimos consejos. Me han ayudado muchísimo a entender la industria, las canciones, los shows… Cada artista me cuenta su aprendizaje en la música, su historia, me da sus consejos y yo voy nutriéndome de cada uno de ellos y me parece maravilloso. Pienso que muy pocos artistas tienen esta oportunidad, y me siento muy agradecida porque me hayan dado la mano y me estén ayudando a todo. Es maravilloso.
- ¿Cuáles son los artistas que te inspiran?
- Es que cada uno me ha traído algo diferente. De ‘Cali y El Dandee’, qué te puedo decir de ellos… Yo era su fan y poder trabajar en mi segunda canción con ellos para mí es toda una historia porque esa canción para mí es mi infancia, mi país, mi cultura…he crecido con ellos. Me cuidan muchísimo, me dan un montón de consejos… me miran y me dicen: ‘Mar, sigue trabajando porque tienes muchísimo talento y vas a llegar muy lejos’. Que estos artistas te digan algo así o un montón de cosas más es como ‘wow’. Ha*sh también me han ayudado muchísimo, me dan alas, confían en mí… y para mí eso es increíble.
- ¿Con quién te gustaría trabajar en el futuro?
- Siempre lo digo y siempre lo diré: trabajar con mujeres. Me gustaría hacer un proyecto con mujeres porque creo que podemos hacer cosas increíbles. Siento que en la industria las mujeres estamos muy infravaloradas. Tienen muchísimo talento y si nos juntamos, demostrar a la gente el ‘talentazo’ que hay.
- Tú te has enfocado en la escena urbana, por ejemplo, que siempre ha sido un género muy masculino, y parece que poco a poco las chicas vais ganando terreno…
- Y tanto ganamos terreno que el Grammy de la categoría urbana lo ganó Karol G. Eso fue un antes y un después. Para nosotras, que se nos abran las puertas en más aspectos que no sea simplemente el pop… Parece que el ser mujer siempre te cierra a hacer un tipo de canciones, y si te sales de ahí, no funciona tanto porque no quieren escuchar a una mujer cantar eso. Que haya ganado un Grammy en categoría urbana una artista como Karol G, que es talentosísima… es maravilloso porque nos abre las puertas a todas las mujeres que estamos por venir.
- Entonces, ¿confías en que tu futuro sea en la música?
- Yo espero que sí. Voy a dedicar mi tiempo mi esfuerzo mi felicidad y mis ganas en que así sea porque me hace feliz. Pero si el día de mañana me hace feliz otra cosa, así será. De momento la música lleva años dándome vida, literalmente. Entonces estoy dejándome la piel en ella, dando lo mejor que sé, y poquito a poco.
- ¿Crees que es algo que puedas continuar compaginándolo con las redes?
- La verdad es que hacer ‘TikTok’ y sacarme fotos me hace muy feliz también. Ha formado parte de mí ocho años, realmente es algo que me sale ya de manera natural. Forma parte de mí y lo voy a llevar siempre en mi sangre. Dejar de hacerlo sería no ser yo. Nunca voy a dejar de hacerlo porque es algo que también me gusta, desde pequeña me encanta, así que lo seguiré haciendo, seguro.
- ¿También te gustaría probar suerte como actriz?
- Mi madre es maravillosa y desde pequeña creyó muchísimo en mí, me apuntó a todo: a ser modelo, a ser actriz, a hacer cástings, a clases de inglés… un montón de cosas para formarme y tener una base sólida… Bueno, sólida no sé, pero sí que es cierto que me dejó probar muchas cosas para que yo pudiera ser lo que quisiera y lo que me hiciera feliz. Yo de pequeña hice interpretación, fui a muchos cástings, aunque nunca me cogieron en nada. Alguna publicidad tonta, algún anuncio… pero nada más allá. Se quedó como el gusanillo y me encantaría algún día hacer alguna película o alguna serie. Volver a interpretar me haría muchísima ilusión y me motivaría muchísimo, pero, de momento, no está en mis planes. Por ahora, estoy centrada en la música, pero si me llega la oportunidad, lo haría.
“Estoy muy feliz y emocionada por lo que viene. Creo que el 2024 va a ser un año mágico y precioso para mí, así que estoy deseando que empiece ya”
- Entonces tus padres no se echaron las manos a la cabeza cuando dejaste de estudiar Arquitectura para dedicarte a esto…
- Sí, sí se echaron las manos a la cabeza… Me querían matar porque, al final, ellos querían que yo fuese una persona ‘normal’. Para ellos, dejar una carrera para vivir la vida de rockstar, como lo digo yo, era muy arriesgado y les daba mucho miedo. También entiendo que en su generación es algo que viven muy pocos. A día de hoy tampoco es que lo vivan tantos, la verdad. Comprendo que es algo arriesgado, pero yo tenía 18 años, y sentí la necesidad de arriesgarme, porque, si no, iba a vivir toda mi vida preguntándome qué hubiera pasado si no me hubiera arriesgado por lo que en ese momento me hacía feliz y por una vida mejor. Creo que lo hice increíble, me arriesgué, gracias a mis seguidores que me han apoyado muchísimo…
- Y salió bien
- Sí, y salió bien. Creo que hice bien en arriesgarme.
- ¿Tienes algún nuevo proyecto a la vista?
- A corto plazo no, porque me gusta mucho trabajar las cosas y que todo esté a mi gusto, pero ahora estoy trabajando en un EP, que espero que salga lo antes posible -supongo que ya saldrá el año que viene, espero que a principios-, y le estoy dedicando mucho amor porque es una manera de explicar mi historia y de acercarme un poco más a la gente que quiera conocerme. Si puedo yo ayudar a quien sea, me haría muy feliz. Estoy trabajando en ello, también estoy cerrando la gira y los shows del año que viene. Estoy muy feliz y emocionada por lo que viene. Creo que el 2024 va a ser un año mágico y precioso para mí, así que estoy deseando que empiece ya.