Hace unos días los espectadores de Hermanos se quedaron en shock al ver como Ömer, tras descubrir donde tuvieron secuestrada a su abuela, en un ataque de ira dejaba a Şevval encerrada en el mismo lugar donde ella retuvo a la señora Sevgi. En los capítulos de esta semana, el joven está muy afectado por todo lo sucedido y se dirige a casa de Asiye para disculparse con su hermana por no haber creído en sus palabras.
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Ömer, profundamente arrepentido, le pide perdón por haber dudado de ella tras haber descubierto la verdad y escuchar de la propia boca de Şevval que fue ella quien secuestró a la señora Sevgi. Después de contarle lo sucedido, Asiye no aprueba el comportamiento del chico y lo convence para que no se tome la venganza por su mano y la libere.
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Juntos acuden a casa de los Yilmaz para sacar a Şevval del cuarto que hay bajo la piscina, pero justo en ese momento son sorprendidos por Ahmet, Yasmin y Sarp que vuelven del viaje antes de lo previsto después de sufrir una avería en el coche. Ömer le cuenta a su padre lo sucedido, causando un gran impacto en toda la familia. Mientras que la madre trata de negar las acusaciones, la hija confiesa que todo es verdad.
¡Qué vivan los novios!
Por otro lado, Tolga sigue adelante con su plan para que su amiga no se tenga que casar obligada con un hombre mayor para saldar las deudas de su hermano. De esta forma, serán ellos dos quienes pasen por el altar. Mientras Seref y el prometido de la chica esperan en el juzgado para celebrar el enlace, Zehra y el hermano de Leyla se casan, con Doruk y Oğulcan como testigos y acompañados por la pequeña Bahar, Berk y Aybike.
En la casa de Tolga comienza una nueva etapa con la llegada de Zehra y Bahar a las que, entre todos, han preparado una gran bienvenida. Sin embargo, los problemas no tardarán en llegar ya que la cuñada de la chica ha descubierto donde se esconde.
El hermano de Zehra, su prometido y dos hombres más aparecen allí. Tolga, Doruk, Oğulcan y Berk no dudan en enfrentarse a ellos. Los chicos acaban ganando la batalla, lo que supone además la culminación del acercamiento entre Berk y Doruk, que sellan su amistad.
Las cosas se complican para los Yilmaz
Al mismo tiempo, Ahmet está como loco y discute con su mujer por encerrar a su madre hasta acabar con su vida, mientras que Ömer no se ha quedado de brazos cruzados y ha ido a la policía a denunciar los hechos.
Şevval y Yasmin declaran en comisaria negándolo todo. La madre de Sarp achaca las acusaciones a las discrepancias que tiene con el hijo ilegítimo de su marido y, después de que el fiscal archive el caso por falta de pruebas, es puesta en libertad.
Ömer y Asiye intentan convencer a Akif para que declare en su contra, pero el empresario tiene razones de peso para no hacerlo. Por su parte, el padre de Doruk sigue con su juego a dos bandas viéndose en secreto con Nebahat a espaldas de Suzan.
Şengül, de mal en peor
La pareja de Orhan busca una solución para hacer frente a la deuda que tiene con Ayla. La tía de los Eren descubre un nuevo negocio tan rentable que cuesta creer que sea verdad y con el que obtendrá dinero de manera rápida. Decidida a invertir en la producción de aceite de oliva, pide un préstamo e hipoteca su casa. Lo que desconoce es que, una vez más, se trata de una estafa organizada por la madre de Berk para terminar de hundirla por completo.
Dos matrimonios rotos y un trágico desenlace
Al volver de comisaria, Ahmet toma una drástica decisión: echa a su esposa de casa y le comunica que se va a divorciar. Şevval hace las maletas y se marcha. Mientras, Yasmin le asegura a Ömer que lo pasó muy mal por la muerte de su abuela, pero que no podía entregar a su propia madre a la policía.
La madre de Sarp no quiere divorciarse, pero Ahmet está decidido y ya ha iniciado los trámites. Por otro lado, Akif trata de asegurarse de que ahora que ha salido a la luz el secreto de Şevval, ella seguirá sin revelar el suyo. Sin embargo, tras el rechazo de su todavía esposo, la madre de Yasmin se refugia en la bebida y mantiene un tenso encuentro con Suzan en el que acaba mostrándole la foto de Akif y Nebahat dándose un beso. La madre de Ömer vuelve a casa enfurecida y echa a su marido a gritos.
Tras la discusión, el gerente del club recrimina a Şevval haber acabado con su matrimonio y ella, bajo los efectos del alcohol, le confiesa haber encerrado a la señora Sevgi. Akif graba la conversación con su teléfono y se va directo a la policía, pero ella le persigue con el coche para intentar pararle y el empresario acaba teniendo un accidente con la moto.