Luis Miguel sigue imparable con su tour mundial por Latinoamérica y Estados Unidos, batiendo todos los récords. En España, donde actuará el próximo verano, acaba de marcar un nuevo hito histórico: tras agotarse las 45.000 entradas para su concierto del 6 de julio en el Santiago Bernabéu, volverá a cantar el 7 de julio, una fecha con la que seguramente volverá a colgar el cartel de sold out.
Si en el plano profesional al ‘Sol de México’ le va de cine, en el personal también puede decir que atraviesa un gran momento, gracias a su relación con Paloma Cuevas y a lo bien que se lleva con su hija, Michelle Salas. Recién llegada de su luna de miel en Japón, la influencer, acompañada de su marido, Danilo Díaz, se reencontró con su padre en el recital que este ofreció en San Antonio, Texas.
Dos días después, Luis Miguel y su hija volvieron a reunirse en Monterrey, en la fiesta que ofreció un empresario mexicano, y en la que el intérprete ofreció un concierto privado. La modelo y su marido estaban invitados y Paloma fue a pasar el fin de semana con ellos, en familia.