El padre Ángel es una de esas personas capaces de llenar cualquier espacio con su sola presencia. Es por este motivo que su ausencia el pasado 13 de noviembre en la misa funeral del recientemente fallecido Fernando Fernández Tapias, generó una enorme preocupación. A pesar de que envió una carta que fue leída en voz alta durante el memorial, el sacerdote no pudo oficiar el servicio debido a una dolencia estomacal que le llevó a ser hospitalizado.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
- La reaparición de Chabeli junto al padre Ángel en Miami
- Así ha sido el último adiós a Carmen Sevilla en un emotivo funeral oficiado por el padre Ángel
Según ha informado su fundación, Mensajeros de la Paz, la cual creó el propio padre Ángel en 1962, el párroco se encuentra "en observación" y fuera de todo peligro, por lo que es posible que en las próximas horas reciba el alta hospitalaria.
"Queremos tranquilizar a nuestros amigos y colaboradores, asegurando que su evolución está siendo favorable y que no hay motivo de preocupación, ya que está en espera de recibir próximamente el alta médica", señala el comunicado hecho público por la propia ONG. "Está de buen ánimo y con ganas de abandonar el centro médico y recuperar su rutina" añadía la nota.
Tanto sus seres queridos como sus allegados confían en su pronta recuperación, pues son conocedores de la gran importancia que tiene para el padre Ángel la llegada de la época navideña, pues es durante estas semanas donde el sacerdote asturiano intenta concienciar, aún más si cabe, sobre las diferentes causas benéficas.
Amigo de sus amigos, y de esos podemos asegurar que cuenta con muchos, entre los que destacan numerosos rostros conocidos, el fundador de Mensajeros de la Paz ha logrado construir a lo largo de su vida más de tres centenares de hogares que dan cobijo a millares de niños y ancianos en más de 55 países, una impecable labor humanitaria que le llevó a recibir en 1995 el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 1995.
Este no es el primer bache de salud al que hace frente el sacerdote asturiano, ya que hace algo más de diez años padeció un cáncer de colon del que acabó recuperándose. "Lo que más me dolía es que iba a marcharme de este mundo con muchas cosas por hacer" señalaba el padre Ángel, quien también ha sido reconocido por su labor con la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo y la Medalla de Oro de Asturias.