Con el emblemático y majestuoso puente Alejandro III de fondo y el Sena bajo sus pies, Victoria de Marichalar mira al horizonte en la ciudad de París. La primera vez que aterrizó en la capital francesa para descubrir cómo era la Semana de la Moda fue en julio de 2021 y lo hizo de la mano de su padre, Jaime de Marichalar. Han pasado casi dos años y medio desde ese día en el que causó sensación sentada en el front row y apareció en la prensa internacional, donde hablaban de ella como un nuevo rostro en la industria fashion. Comenzaba el llamado ‘efecto Victoria’ y, desde entonces, mucho ha cambiado su vida. Las primeras filas de los desfiles internacionales ya no tienen secretos para ella, se ha convertido en un referente de estilo, su nombre figura en las listas de las fiestas más exclusivas, en las redes sociales suma adeptos cada día y se mueve como pez en el agua por el reino de la moda de París, donde ahora posa para ¡HOLA!, impactante, vestida por Louis Vuitton.
“Considero que estoy en un momento muy bueno en todas las áreas de mi vida. Soy feliz y, a su vez, tengo proyectos en mente que me ilusionan y motivan a seguir creciendo”
Se declara una gran admiradora de la maison francesa y con sus looks para este otoño-invierno demuestra, una vez más, que sabe cómo enamorar a la cámara. Tiene porte de modelo, un estilo propio y muchas ganas de continuar creciendo en este mundo que la ha abierto sus puertas de par en par y en el que ha entrado pisando fuerte. Victoria ha sabido hacer de su pasión una profesión y cuando mira al futuro lo hace teniendo claro que quiere seguir recorriendo el camino profesional que ha elegido, donde tiene mucho que aportar con su visión y su forma de interpretar el mágico universo que es la moda.
“El gran consejo que me ha dado mi padre es prestar siempre atención a los pequeños detalles, al valor diferencial de cada firma, de cada prenda y cada complemento”
—¿Qué simboliza para ti la firma Louis Vuitton?
—Es un referente de elegancia y lujo. Destacaría, sin duda, toda la historia que hay detrás de la firma. Es de admirar que su fundador, Louis Vuitton, comenzase diseñando baúles y maletas en un pequeño atelier y esto fuese solo el principio de lo que es hoy en día una de las casas de moda más importantes del mundo.
—¿Qué es lo primero qué te atrajo de esta mítica casa francesa, los complementos o la moda?
—Ambos, pero en especial sus bolsos. Si tuviera que elegir uno, me quedaría con el icónico ‘Monogram’.
—Vestida por Vuitton, de la oficina a una fiesta… Si tuvieras que elegir un estilismo de los seis que llevas en este reportaje, ¿con cuál te quedarías?
—Es difícil responder a esta pregunta porque la mayoría de ellos me los pondría para ir de la oficina a una fiesta.
—Cuando eliges un look para acudir a un evento, ¿confías más en ti o en un asesoramiento? ¿Prevalece más la auténtica Victoria o la imagen que quieres crear en ese momento?
—Para mí es imprescindible sentirme cómoda a la hora de vestir, ya sea para un evento o en el día a día, y eso implica ser fiel a mi estilo. Arriesgar me encanta, pero siempre manteniendo mi esencia.
“En el futuro me veo dando más pasos en el mundo de la moda y afrontando distintos retos en él”, confiesa al preguntarle sobre cómo se imagina dentro de unos años
Su vida a pie de pasarela
—¿Qué tendencias, por muy de moda que estén, no entrarán nunca en tu armario?
—Nunca digas nunca. Pero en mi armario no entrarían las mangas exageradamente abullonadas.
—¿Qué has visto en el último front row de París que te llamara la atención?
—Me han encantado las chaquetas tipo bomber y también las faldas con tanto vuelo y diferentes estampados.
—¿Qué es lo que más disfrutas en los desfiles?
—La experiencia completa, desde el privilegio de ser invitada hasta poder conocer las nuevas colecciones que están por lanzarse.
—En conversación con ¡HOLA!, nos has dicho que la moda es tu pasión y que no descartabas desfilar algún día. ¿Podría ser este el siguiente paso profesional?
—Es algo que no descarto, pero ahora mismo tengo otras ideas en mente.
“Últimamente, cuando voy de viaje, en mi maleta no falta mi cámara de fotos analógica para capturar momentos especiales en cada sitio al que vaya”
—¿Qué es lo que más te gusta, lo que más te llama la atención del mundo de la moda? ¿Es un plan de futuro definitivo?
—Entender la moda como una vía de expresión, como algo creativo y divertido. Es una opción que siempre he tenido en mente y que me llama mucho.
—¿Te ves estudiando Diseño? ¿Cómo te imaginas dentro de unos años?
—Me veo dando más pasos en el mundo de la moda y afrontando distintos retos en él.
Una pasión que viene de familia
Con el gusto por la moda se nace, pero muchas veces, además, se hereda, y ese es el caso de Victoria, que, aparte de gustarle, lo lleva en el ADN. Su padre siempre ha destacado por su elegancia, marcó tendencia en una época en la que ni existía la palabra influencer y trabaja desde hace años como consejero de Bernard Arnault, el dueño de LVMH, el grupo de lujo más grande del mundo, que engloba firmas como Louis Vuitton. Así que no es de extrañar que haya crecido conociendo quiénes eran los grandes de fashion system y tenga en su progenitor a su mejor mentor.
—Don Jaime de Marichalar, tu padre, es un gran entendido en moda, ¿cuál es el gran consejo que te ha dado?
—Prestar siempre atención a los pequeños detalles, al valor diferencial de cada firma, de cada prenda y cada complemento. Y ser siempre agradecida con todos.
—¿Qué prendas no van a faltar en tu armario este otoño?
—No van a faltar los jerséis de punto, ideales para mantenerme abrigada y a la moda durante los días de más frío.
—¿Qué te dicen tus amigas? Rocío Laffón, María García de Jaime… son tu piña. ¿Qué significa para ti su amistad?
—Justo las dos personas que nombras son íntimas amigas mías y les tengo un cariño especial. Para mí, la amistad reúne muchos valores. Las siento como ‘familia’.
—¿Qué importancia tiene en tu vida tu familia natural y tu otra familia, la de tus de amigos?
—Mi familia siempre ha sido lo primero, pero, por supuesto, mis íntimos amigos también tienen un papel importante en mi vida.
“Mi familia siempre ha sido lo primero, pero, por supuesto, mis íntimos amigos también tienen un papel importante en mi vida”
Su maleta
—Ahora, que eres una gran viajera, ¿qué llevas siempre contigo?
—Últimamente, en mi maleta no falta mi cámara de fotos analógica para capturar momentos especiales en cada sitio al que vaya. Tampoco puede faltar mi neceser con mis cremas y productos para el cuidado de la piel. Y, por supuesto, ahora que viene el frío, no puede faltar un pijama calentito.
—¿Has aprendido a ser práctica o triunfa el «por si acaso» y acabas saliendo de casa con una maleta grande?
—Reconozco que acabo cayendo en los ‘por si acaso’, por mucho que intente evitarlo. Me suelo hacer una lista con todo lo que necesitaría y siempre, al final de ella, están los ‘por si acaso’.
—Como joven del siglo XXI, ¿cuáles son tus inquietudes?
—Dedicarme a lo que me gusta profesionalmente, pasar tiempo con mi familia y mis amigos, tener tiempo para mí y mis hobbies…
—¿Cambiarías algo de tu vida en este momento?
—Considero que estoy en un momento muy bueno en todas las áreas de mi vida. Soy feliz y ,a su vez, tengo proyectos en mente que me ilusionan y motivan a seguir creciendo.