Carlota Casiraghi (37 años) está de visita en nuestro país desde que este miércoles, 1 de noviembre, llegara a Sevilla. La nieta del príncipe Rainiero y Grace Kelly ha disfrutado de una estupenda velada en la capital andaluza rodeada de una decena de amigos. En esta ocasión, la hija de Carolina de Mónaco y el desaparecido Stéfano Casiraghi ha llegado a España sin la compañía de su familia ya que ni su marido, Dimitri Rassam, ni sus dos hijos Raphäel y Baltazhar, han viajado con ella.
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Según hemos podido saber, la sobrina del príncipe Alberto y de Charlene de Mónaco ha aprovechado su estancia en la capital hispalense para disfrutar de la gastronomía local acudiendo a una conocida taberna del centro de Sevilla. Carlota Casiraghi cenó en El Rinconcillo, un restaurante del siglo XVII que ofrece tapas y platos tradicionales españoles. Se trata de uno de los bares más antiguo de España, ya que abrió oficialmente sus puertas en el año 1670, en el número 40 de la calle Gerona, donde sigue ubicado todavía. Carlota y su grupo de amigos degustaron una cena compuesta de jamón ibérico, gambas, espinacas y pavías de bacalao.
Una noche de gastronomía y tradiciones locales
La anécdota de la noche ocurrió cuando, alertados por el ruido de los tambores, Carlota y su grupo de acompañantes no dudaron en asomarse, desde el balcón de la planta superior del restaurante, para presenciar una procesión de Gloria, la de la Virgen del Rosario de Santa Catalina, que pasaba en esos momentos frente al restaurante. La hija de la princesa de Hannover vestía de manera casual, sin maquillaje y con el pelo suelto, mostrando su imagen más natural.
Embajadora de moda, cantante y organizadora de encuentros literarios
Desde que fuera nombrada embajadora y portavoz de Chanel, Carlota ha vuelto a la escena social con más presencia que nunca. Además de convertirse en la protagonista de una espectacular campaña, asiste a todos los desfiles de la maison, organiza los encuentros literarios Rue Cambon (aunando así sus dos pasiones, la moda y los libros) y, para sorpresa de todos, durante la presentación de la colección crucero 2021-2022 de la casa, en Les Baux-de-Provence, la hija de la princesa de Hannover se subió al escenario y se puso a cantar. Con su belleza y su voz grave y sensual, fascinó a todos los presentes.