Son una de las familias más conocidas de las redes sociales. Con María, la pequeña de las tres hermanas Pombo, comenzó todo. Ella fue la pionera de la casa en sumar seguidores por cientos de miles -y luego millones- y una de las primeras creadoras de contenido de nuestro país a la que se le empezó a aplicar el término influencer. Ahora, más de diez años después, ha levantado un imperio, se ha convertido en una empresaria de éxito y un referente de moda y estilo de vida y el resto de su familia ha ido con ella de la mano. Sus hermanas Marta y Lucía también arrasan y todo lo que hacen genera miles de likes. Así que el apodo de Las Pombashian que les pusieron hace unos años no les puede ir mejor, porque suman y siguen y su poder en el universo de las redes es cada vez mayor.
Y, ¿quién inspira a las hermanas Pombo? Pueden tener muchos referentes de moda o personajes a los que admiran, pero, sobre todo, quien las empuja a ser como son, a no rendirse y a hacer frente a las adversidades y a luchar por sus sueños sin ponerse límites es una mujer, la más importante de sus vidas: su madre. Para ellas es su gran ejemplo, una mujer luchadora que siempre está ahí para su familia con la mejor de las sonrisas.
Desde hace años, Teresa Ribó padece esclerosis múltiple y sus hijas han crecido viendo como vive con la enfermedad siendo siempre muy positiva y disfrutando de los suyos. Con esta misma actitud, María afrontaba en 2020, embarazada de Martín, la noticia de que ella también tiene esclerosis. “Intento pensar lo menos posible en mi enfermedad, creo que el poder de la mente hace mucho y tengo el mejor ejemplo en casa, mi madre. Nunca la hemos visto lamentarse y yo, como hija suya, quiero estar a la altura”, decía en declaraciones a ¡HOLA!
¡La última vez que las hemos visto juntas ha sido el pasado sábado 21 de octubre, en una cita muy especial: la boda de Marta con Luis Zamalloa. Ese día protagonizaron una imagen que compartieron con ¡HOLA!, en la que se refleja perfectamente cómo es la relación que las une. Una fotografía en la que intercambian risas y confidencias momentos antes de poner rumbo a la ceremonia en la que Marta dio el “sí, quiero” al padre de su hija.
La instantánea recuerda a la que protagonizaron en junio del año pasado cuando se casó Lucía con Álvaro López Huerta. En el tiempo que separan a estas dos fotografías, han vivido momentos únicos. Marta se comprometió ese verano con Luis y en octubre, dieron la bienvenida a su primera hija, Matilda. Pero la familia no ha parado de crecer ahí, el pasado mes de junio nacía Vega, la segunda hija de María y Pablo Castellano. Por su parte, Lucía ha cumplido su primer aniversario de boda y sigue siendo una Pombo de altos vuelos, ya que, como varios antepasados en su familia, es piloto y trabaja en una aerolínea, compaginando la aviación con las redes.
Son cuatro mujeres distintas, pero a la vez con muchas cosas en común, todas demuestran su fortaleza a cada paso y ante las adversidades sacan coraje y corazón para seguir adelante. Por su posición en las redes, donde cada día van ganando más peso, están muy expuestas a las críticas y han aprendido a vivir con ello, aunque también alzan la voz -y es necesario hacerlo- cuando el odio traspasa ciertos límites, que ni ellas ni nadie deberían aguantar. A pesar de la parte difícil que conlleva trabajar en una ventana tan abierta al mundo, en la balanza pesa más la cara buena de las redes y les gusta seguir mostrándose como son, como mujeres reales, con vidas reales que a veces pueden parecer perfectas, pero que tienen sus imperfecciones y quizás aquí resida el secreto de su éxito.