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Llenan estadios, sus canciones traspasan fronteras y suman millones de seguidores en redes sociales. Emilia Mernes , Aitana , Rosalía, Lola Índigo… Son las estrellas del momento. Una nueva generación de cantantes que conquista los escenarios con fuerza. Y aunque sus hits puedan sonar muy diferentes, todas ellas comparten un denominador común: un estilo muy personal , único, que las ha convertido no sólo en ídolos musicales, sino en pura inspiración para la ‘generación Z’. Detrás de muchos de los looks con los que sorprenden en sus conciertos, se encuentra ‘ Dominnico ’. O mejor dicho: Domingo Rodríguez Lázaro.
Él es el creador de esta firma española -que define como “pop, universal, diversa, libre”- que ha conquistado tanto a artistas de nuestro país como del otro lado del charco. Entre sus últimas creaciones se encuentran las piezas que ha lucido la argentina Emilia en su última gira, pero, también, las de Beyoncé en Renaissance. El proyecto que comenzó hace siete años, es, ahora, una realidad, en la que han jugado un papel muy importante las plataformas y medios digitales: “han sido nuestros mayores aliados. Instagram ha sido nuestra mayor fuente para convertir impactos y likes en ventas”.
Hablamos con él sobre todo ello en el Europe Fashion Summit, el primer encuentro internacional sobre moda, tecnología y negocios que tuvo lugar en Madrid el pasado mes de septiembre.
© GettyImages- Comenzaste hace siete años… pero eres súperjoven. Cuando empezaste tu marca, ¿te imaginabas que llegarías tan pronto hasta aquí?
- Creo que eso es complejo. Cuando creé la marca, al final, era un proyecto de marca… y bueno, de ahí a profesionalizarlo, llevarlo a ser una empresa... Ya tenemos equipo, talleres propios… hay una logística y un organigrama mayor. La verdad es que ha sido bastante duro al no tener una inversión detrás. Ha sido un proyecto que poco a poco se ha ido profesionalizando, y la verdad es que vamos teniendo una facturación mayor. Estamos muy contentos con la internacionalización, y todo lo que nos han brindado las plataformas digitales.
- Has trabajado con algunas de las estrellas más importantes de la música a nivel internacional, como Lady Gaga. Siempre has hablado de lo importante que han sido las redes sociales en este ascenso, estas estrellas, ¿te contactaban a través de redes sociales?
- En un principio sí. Fueron las redes las que nos dieron ese empujón. Se convirtieron en una ventana para mostrar el trabajo, pero sí es verdad que muchos de los estilistas nos contactaban por mensaje directo. La red principal es por correo, y al final no se trata de cesiones o momentos espontáneos, sino que trabajamos con ellas a lo largo de sus carreras. No las tratamos como celebrities, sino como clientas.
- También están Rosalía, Aitana… Tú fuiste quien hizo el vestuario del Malquerer, con el que Rosalía alcanzó el estrellato. ¿Cómo fue trabajar con ella?
- Wow… esta es una pregunta de hace años (ríe). Bueno, es una mujer a la que admiro muchísimo, en una etapa de crecimiento, aunamos fuerzas… Ahora incluso hemos empezado a trabajar con Beyoncé para su último álbum, Reinassance. Hay tres looks que de alguna manera saldrán. Hemos estado trabajando con ella. Hicimos fitting con su modelo de fitting en París.
“Rosalía es una mujer a la que admiro muchísimo. En una etapa de crecimiento, aunamos fuerzas”
© @iamdomingorodriguez- Emilia Mernes también ha empezado a llevar muchos tus diseños…
- Le hemos diseñado toda la gira.
- ¿Qué supone para ti que vista tus diseños?
- Hemos trabajado con Lali Espósito, con María Becerra... también nos han pedido varias veces ropa para Nicki Nicole… Con Emilia empezamos trabajando para algunos videoclips, nos encargaron unas piezas que hicimos a medida y demás. Quedaron muy contentas. Empezamos a desarrollar piezas y otras de colección que luego hemos ido transformando para ella. Cuando creamos un proyecto de gira, no es tal cual el producto que sale en show. Trabajar con ella ha sido un amor. Cada vez escucho más su música en diferentes entornos, y sus looks van logrando aceptación. Nos pasó igual con María, la teníamos ubicada por una canción con J. Balvin, y también logró posicionarse en España. También ella refleja bastante el espíritu de la marca. Quizá como más… explícito sin ser explícito, es muy atrevida, le gusta muchísimo el cuero... es muy fácil encajar los códigos estéticos con ella.
- Da la impresión de que Emilia representa bastante el estilo de la firma, un poco futurista...
- Me gusta muchísimo cuando se trata de cantantes de habla latina o castellana. Cuando cantan sus canciones todo nos puede sonar muy explícito, pero en inglés, acabamos escuchando lo mismo o con palabras incluso mucho más subidas de tono…. Y al principio era como, bueno, es un reto, es una nueva generación de cantantes de reggaetón, de música de ese tipo. Y al final lo que sí he visto de su equipo -y por lo que me ha gustado formar parte de ello-, es que han elevado su imagen, más allá de lo que digan las letras, ¿no? Lo que es ella y crear de algún modo ese personaje. Era algo como bastante easy (fácil) porque al final hablábamos de lo mismo.
© GTres
© GettyImages- Aitana ha hecho un cambio total de look con su nuevo disco que ha sido muy comentado… ¿Te gusta, como artista?
- De la industria de la música no puedo opinar muchísimo, pero sí que entiendo que, de alguna forma, la mayoría de artistas han ido hacia el reggaetón o hacia la música electrónica. Son los dos tipos de música que están funcionando ahora mismo, más que el pop. Siento que ella es súper joven, entonces está en etapa de experimentar y siento que siempre ha sido una artista muy juzgada, quizá por ser como más neutra y dirigirse a un público más joven… He notado que ella sí que ha tenido una responsabilidad, con sus seguidoras y su público, que va más allá. Evidentemente en la adolescencia acabas forjando tu identidad, entonces es bonito que alguien te dé vía libre para expresarte. Están ahí ambos caminos. Me gusta su estética, me gusta lo que está haciendo. La siento cada vez más libre, no sé en qué sentido porque hablo desde el desconocimiento… libre a la hora de expresarse. Sí que creo que hay algo importante en cada una de ellas y en lo que trabajamos. Nosotros, al final, diseñamos por y para personas, trabajamos sobre la identidad y la libertad del individuo, y eso no quiere decir que porque lleve un tipo de pieza u otra vaya a tener como una imagen como más sexualizada o menos. Mientras sea ella la que elija ser esa persona, será guay… y si quiere que le acompañemos en el camino, estaremos en el camino. Pero parece que va por esa vía.
- ¿A quién te gustaría vestir?
- Nos contactaron hace unas semanas para la nueva gira de Madonna. No sabemos todavía lo que va a pasar, pero si es cierto que es una de sus últimas giras, sí sería importante para nosotros. Sería como ‘wow, hemos llegado ahí’. Sí me hubiera gustado mucho vestir en su momento a Michael Jackson, creo que hubiese sido muy afín a la marca. Hay muchos artistas con los que me gustaría trabajar a día de hoy, como Lil’Nas… creo que es súper abierto como concepto, como música… No sé, también me sentiría cómodo hasta con una artista como Dua Lipa, que represente el mainstream. De hecho, ha llevado nuestras joyas. Yo creo que Dominnico está hecha para todes, es como más abierto. Y a partir de ahí, en el momento en que queramos que les acompañemos, ahí estaremos. No sólo para las cantantes.
“Me gusta la estética de Aitana y lo que está haciendo”
© @iamdomingorodriguez
© @iamdomingorodriguez- Te especializaste en cuero…
- Bueno sí, en marroquinería, en peletería… siempre digo que lo voy a dejar, pero no lo hago. Nosotros trabajamos con restos de stock de fábricas, después decoloramos, teñimos… al final, trabajamos con un material noble y no es lo mismo que trabajar con denim, aunque hemos hecho también piezas de upcycling denim, con ropa de Humana, de un euro, que han llevado un trabajo súper laborioso. No hay un material al que haya dicho que no. También me formé en sombrerería.
- Creciste un poco entre agujas, ¿no? Porque tu madre también forma parte de esta industria
- Ella ha trabajado técnicas artesanales y en el textil siempre desde un lado más como proveedor o artesanal, más propio. Pero no es algo que yo en casa haya tenido muy al alcance. Siempre se ha reservado, y yo, cuando empecé a ser más consciente, ella ya era empresaria junto a mi padre. Ella me ha apoyado en un sentido de: ‘Lo que yo no he podido hacer, que lo haga él’. También he contado con el apoyo de mi padre. Pero trabajar junto a mi madre no es algo que yo recuerde. De hecho, yo he tenido que deconstruir mucho… Comencé a coser a los 18 años, cuando yo en casa tenía máquinas de coser, y era como… ‘wow’, en qué momento ves que a tu hijo le gusta eso y no has tenido momento para compartirlo. He venido de un ambiente como más reservado. Pero sí que es verdad que me ha pillado bastante lejos y ha sido ya como de mayor ese cambio.
© GettyImages- Y a día de hoy, ¿qué te dice?
- Bueno, yo creo que en casa tenía que demostrar, en el momento en el que terminé mi formación, que había una viabilidad a nivel empresarial y que había salidas dentro de la industria. Pese a que hay ayudas, subvenciones o premios… los proyectos hay que sacarlos adelante con muchísima inversión, y yo sí que tuve claro que mis padres me apoyarían en los estudios, pero no en mi etapa empresarial porque era mi problema. Sí que ha sido un poco como… cada paso que he ido dando, han ido entendiendo la magnitud del tema. De alguna manera, son fans y vienen a los desfiles y todo.
- ¿Crees que en España tenemos talento?
- Yo creo que sí. Cada vez hay más plataformas y espacios para la creatividad. Creo que las redes sociales nos han abierto al mundo a nivel muy heavy, a nivel de contactos, de clientes... Nos permiten que se nos pueda conocer en cualquier lugar del mundo. Nosotros vendemos mucho a Corea. Creo que sí, que cada vez hay más facilidad para que nuestro trabajo se viralice. Considero que las oportunidades también las creamos nosotros mismos, entendiendo el tema económico como un obstáculo. Tampoco pretendo ser el ejemplo de toda una generación. No ha sido suerte. Ha sido trabajo, esfuerzo y un equipo súper competente detrás. Más allá de mi persona.
- ¿Y en qué te inspiras?
- Hay muchas cosas que hago que no me gustan hacer. Eso no es… quiero decir, es difícil, es una profesión que al final hay muchas tareas, hay muchas partes. Y cada vez puedo ir delegando más en todo lo que se refiere a lo empresarial, a los números y demás… pero, al final, acabo estando en muchos de los procesos de la creación de las piezas. Evidentemente te diría que lo que más me gusta es diseñar, ver cómo conectan los materiales, entender la pieza… entender que es como un conjunto, como una construcción, algo incluso un poco arquitectónico. Hemos hecho un ejercicio de simplificar las piezas, cambiar el target e ir hacia otra era. Ahora estamos haciendo faldas de 25 centímetros que no pueden tener más información: cuatro bolsillos, cinturón, 17 tablas… es como que me cuesta todo ese proceso, y a la vez es como ‘wow’, me gusta entender la concepción de la pieza.
