La semana pasada, la pareja de empresarios formada por Cristina Yanes y José Luis Santos celebraron sus Bodas de Coral, 35 años de casados, con una gran fiesta en un hotel de Barcelona. Entre amigos y familia fueron un total de 400 los asistentes que acompañaron a los anfitriones en la renovación de sus votos. La diversión fue la tónica general de este fin de semana inolvidable, en el que también destacó la elegancia de las invitadas: cumpliendo con el dress code exigido, las damas vestían de largo, complementando sus looks con las joyas más fascinantes, y en los colores de la amplia gama cromática del coral, del verde al negro, pasando por el gris azulado, el amarillo, el blanco y por supuesto el rojo y el naranja. El resultado, un desfile digno de una alfombra roja al más puro estilo Hollywood, pero, en su mayoría, de factura española, como veremos a continuación.
La empresaria, alma de la joyería creada por su familia, Yanes, confió su vestido “de novia” a una de sus diseñadoras preferidas, Marta Rota, fundadora de Tot-Hom. Con su elección, Cristina quiso además rendir homenaje a la creadora catalana, puesto que la celebración tuvo lugar en Barcelona. Rota creó un diseño de alta costura para la ocasión, un vestido blanco con incrustaciones de cristal, escote redondo, mangas con volantes rígidos y, como guiño al aniversario que se celebraba, un bordado de corales en el corsé. Cristina lo complementó con un fabuloso collar y pendientes de diamantes, que le prestó su madre, Manuela.
Estaba claro. La empresaria cordobesa tenía que llevar una de las creaciones de su línea de diseño para Rosa Clará. Paloma se convirtió en una impresionante mujer de rojo con un vestido de noche en crepe del mencionado color y mangas-capa de georgette hasta el suelo. De escote cuadrado, que dejaba a la vista la clavícula perfecta de la diseñadora, el vestido lleva como detalle en la cintura un bordado de hojas doradas, que Paloma combinó con un “clutch” del mismo tono. Con su melena suelta y la mejor de las sonrisas, estaba radiante y más guapa que nunca. Sin duda, el gran momento que está viviendo con Luis Miguel es el mejor elixir de belleza.
A la mujer de Luis Alfonso de Borbón le une una gran amistad, además su relación de “comadres”, con Cristina Yanes. Por eso, a pesar de haber asistido ese mismo día a la boda Daniel Martínez-Bordiú (primo de su marido) en Madrid, viajó a Barcelona por la noche y puso todo de su parte para deslumbrar en la fiesta de sus amigos. La duquesa de Anjou confió de nuevo en su estilista de cabecera, Cristina Reyes, para su look: un vestido dorado de la británica Jenny Packman, que le sentaba como un guante. De línea ajustada en el talle y las caderas, y evasé en el resto de la falda, el traje tiene un pronunciado escote en V, corte en la cintura y mangas drapeadas, con los hombros muy marcados, que forman una capelina en la espalda. Completamente forrado de lentejuelas, su disposición en degradé —de menor a mayor tamaño hacia el bajo de la falda— otorgan al vestido un estilo vanguardista, nada recargado.
Gema Ruiz también optó por una creación británica, en concreto por una de las firmas preferidas de Kate Middleton, princesa de Gales: Temperley London. Su vestido, realizado en tul color rubor, combinaba las aplicaciones de lentejuelas con originales y coloridos bordados de flores y colibríes en el talle. Con mangas ligeramante acampanadas, como la forma de la falda, se trata de un diseño muy romántico, que Gema combinó con unos espectaculares pendientes y un clutch metalizado del mismo color que su traje.
La periodista fue otra de las invitadas que escogieron el rojo en su atuendo para sintonizar con la temática de la noche. Patricia, que asistió con su actual pareja, el ejecutivo Kiko Gámez, llevó un vestido muy similar al de Paloma Cuevas, pero es que se trataba de un diseño de la colección de Paloma para Rosa Clará. Por lo que más que coincidencia fue totalmente intencionado. En su caso, el traje, realizado en georgette de seda, contaba con un amplio escote barco, un marcado drapeado en el cuerpo y falda plisada de vuelo. La guinda, es la capa que parte del cuello hasta el suelo y que Patricia movió con todo el arte en la fiesta.
También de Paloma Cuevas by Rosa Clará era el diseño que lució Nuria March. Con el mismo corte que el vestido azul cielo que la diseñadora llevó en la boda parisina de Dani Clará, el de Nuria era de georgette anaranjado, el color que normalmente asociamos con el coral. Un etéreo traje con el cuerpo drapeado, pronunciado escote en forma de V y unas vaporosas mangas a modo de capa, que caen hasta el suelo, fundiéndose con la propia falda plisada del diseño. En la imagen, Nuria con su marido, George Donald Johnston III
La bella modelo y actriz mexicana decidió ir a lo seguro y confiar en una de sus firmas de cabecera: Tot-Hom. Jaydy, que actualmente reside en Barcelona junto a su marido, el entrenador de fútbol Rafa Márquez y el hijo de ambos, Leo, impactó con un vestido de noche de la colección de Alta Costura de Marta Rota. De seda color verde musgo, con escote asimétrico, cuerpo drapeado y línea tubular, el voluminoso lazo sobre un hombro, que cae a modo de capa, es el protagonista de este look de invitada perfecta, que Jaydy combinó con accesorios en plata.
Lydia Bosch y Andrea Molina, coordinadas en flores
La popular actriz y la mayor de sus hijas fueron de las pocas invitadas de la fiesta que se atrevieron a lucir vestidos estampados, los dos de la colección de fiesta de Rosa Clará. El de Lydia, realizado en brocado, era de estilo clásico, con falda de tablas y bolsillos, y escote palabra de honor, con la espalda descubierta y mangas abullonadas —de plena tendencia en looks de invitada— desmontables. Por su parte, Andrea llevó un vestido largo y fluido de corte recto, confeccionado en bambula estampada. De escote asimétrico, la manga francesa abullonada crea el contraste.
La experta en moda y empresaria también se decantó por un traje de la colección de fiesta de Rosa Clará, sin duda una de las diseñadoras favoritas de la noche. No hay que olvidar que para su boda con Jaime Polanco, en 2009, Fiona confió también en la creadora catalana. En esta ocasión, optó por el color verde esmeralda con un vestido largo, de estilo clásico y corte evasé, realizado en piqué, con escote palabra de honor, mangas abullonadas y con detalle de fajín. La empresaria lo combinó con los pendientes diseñados por Paloma Cuevas para Yanes que le había regalado para su boda
La marquesa de Casa Peñalver, casada con Pablo Santos y por lo tanto es cuñada de los anfitriones, Cristina Yanes y José Luis Santos, acudió a la fiesta deslumbrante con un vestido naranja que resaltaba su bonito bronceado. De línea sirena, con escote cuadrado, tirantes anchos, cuerpo drapeado y rematad con un volante de capa, el traje solo es apto para siluetas perfectas. Curiosamente, se trata del mismo vestido que su sobrina Alicia Ortiz Alcocer (la hija de su hermana Alicia) llevó en la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, en la que la joven destacó como la invitada más cool.
,type=downsize)
