El mes de septiembre ha traído un giro profesional a la vida de Lara Álvarez. Tras poner fin a su etapa de ocho años en Supervivientes y ponerse al frente de Me resbala y disfrutar de un intenso verano con viajes por todo el mundo (desde Ciudad del Cabo a Isla Mauricio), la presentadora asturiana se aleja de la televisión. Eso sí, sigue estrechamente ligada al mundo de la comunicación y los medios ya que se ha incorporado al equipo docente del centro de formación Radiofònics de Madrid.
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A los 37 años, Lara se enfrenta a un novedoso reto: ser profesora de un Curso de Presentador de Televisión y Reporterismo que se imparte en el citado centro educativo. Las clases ya han comenzado y sus primeras sensaciones no pueden ser mejores. La presentadora ha explicado en Semana que está contenta y motivada al vivir el Periodismo desde esta perspectiva que le permite formar a futuros comunicadores con los que, quién sabe, podría pasar de coincidir en las aulas a ser compañeros de trabajo.
Por el momento, la presentadora asturiana ha impartido ya dos cursos y se prepara para el tercero, que está fechado para finales de este mismo mes. Lara comparte esta experiencia con compañeros de Mediaset como Carlota Corredera, Luján Argüelles y David Valldeperas. También es profesor Miquel Valls, que este mismo verano ha dejado la cadena de Fuencarral para incorporarse a Espejo público, espacio de Antena3 presentado por Susanna Griso.
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Este nuevo compromiso profesional le permite a Lara Álvarez tener tiempo para sí misma y centrarse en su bienestar, practicando deportes como yoga y pilates, y también seguir formándose. Y es que acude por las tardes a clases de inglés. Un modo de vida más pausado que llega tras años de ritmo frenético. Según explicaba Lara en ¡HOLA!, "el éxito es el equilibrio" y ahora está en un "momento pletórico" en el que "las cosas se han ido armonizando y que ya van en la dirección que yo quiero.
Este capítulo con la calma como eje se produce después de una etapa en la que ha tenido problemas de ansiedad que ha gestionado gracias a la terapia. En Supervivientes, según contaba, vivió días difíciles tras esa enorme sonrisa que mostraba delante de las cámaras: "Hasta 30 segundos antes de salir a un directo estar vomitando, pero vomitando en una esquinita al lado de un árbol, ¿sabes? en Honduras, de estar vomitando fatal de la ansiedad, de la tristeza que tenía en ese momento y luego entrar y decir: '¡Muy buenas noches, Jorge!".
Su situación personal
Hermética en cuanto a su vida privada, sí tiene claro que le apetece estar soltera siempre y cuando estar soltera te hace más feliz que estar en pareja. En este sentido apunta además que no le vale la pena "estar con alguien de cualquier manera". Volcada en vivir el presente, no tiene claro que quiera dar el paso de ser madre, pero sí ha decidido congelar sus óvulos y considera que es una de las mejores decisiones que ha tomado.