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Las imágenes de dolor de Celia y Tamara Flores en la capilla ardiente de Massimo Stecchini, pareja de su madre Pepa Flores, demostraban lo unidas que estaban al italiano. La repentina muerte del empresario a los 63 años de edad el pasado 3 de septiembre dejó a la familia sumida en la tristeza, pues Massimo compartió 35 años de su vida con la intérprete. Celia, de 41 años, ha recordado con un emotivo mensaje al italiano, mostrando lo mucho que les duele su ausencia. “Mi nonnito, mi vida entera. En un segundo se paralizó todo, se nos rompió el alma” comienza, utilizando el cariñoso apelativo que utilizaba para referirse a él. “Jamás creí que sería tan pronto” lamenta.
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Las imágenes de las hijas de Pepa Flores, muy afectadas en el tanatorio de Massimo Stecchini
Continúa la artista agradeciéndole todo el tiempo que pasaron juntos y el apoyo que siempre les mostró. “Gracias te daré eternamente por estar siempre a mi lado, por haberte dejado la piel en criarnos y cuidarnos, por tu amor puro e inmenso. Fuiste más que un padre para nosotras y para tus nietos” señala. Asegura que le echarán mucho de menos y le dedica una última frase conmovedora a la que muchos amigos y seguidores han respondido enviándole todo su cariño. “Cuánto te extrañaremos. Cogemos tu mano, volamos contigo y te dejamos ir en paz y que la luz más brillante y bonita te llene y proteja. Tú niña que te ama por siempre en este y en todos los mundos que existan. Mi Nonno”.
Una relación estable y tranquila
Marisol, que fue niña prodigio del cine español y cumplió 75 años el pasado febrero, se alejó del revuelo de la fama a mediados de los años ochenta. En su Málaga natal encontró su refugio después de una intensa carrera que comenzó cuando tenía apenas once años en la película Un rayo de sol (1960). Su prodigiosa voz y su talento para la interpretación la convirtieron en una de las artistas infantiles que pasarían a la historia del cine español. Pepa Flores se casó por primera vez en 1969 con Carlos Goyanes, junto a quien estuvo hasta 1972. En 1973, conoció al bailarín Antonio Gades, con quien tuvo a sus tres hijas: María Esteve (48), Tamara Esteve (46) y Celia Flores (41). En 1986, se separaron.
En Málaga conoció a Massimo Stecchini, gerente de la pizzería Trastevere, con quien mantuvo una relación estable que duró más de tres décadas. Su relación transcurrió siempre con una gran discreción y ambos se mantuvieron siempre muy unidos. La repentina muerte de Massimo truncó tristemente su felicidad.