El cantante Liam Payne, de 30 años, estaba disfrutando de unas románticas vacaciones en el Lago Como, en Italia, con su novia Kate Cassidy cuando tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital. El intérprete pasaba unos días tranquilos que se vieron interrumpidos por un intenso dolor en el riñón, lo que motivó su traslado inmediato en ambulancia a un centro médico. Parece que tendrá que permanecer unos días ingresado, aunque no han transcendido más datos acerca de su evolución. Algunas fuentes cercanas aseguran al Daily Mail que “no se encuentra bien” y que espera que los médicos encuentren las causas de esta recaída.
Y es que hace un par de semanas él mismo comunicaba con disgusto la cancelación de su gira por Sudamérica debido a una importante infección de riñón por la que ya había tenido que ser ingresado. “Con gran tristeza os tengo que decir que no tenemos más opción que posponer mi gira por Sudamérica. La semana pasada estuve en el hospital con una seria infección de riñón, es algo que no le deseo a nadie. Las órdenes de los médicos son que ahora necesito descansar y recuperarme” comentó en sus perfiles. Lamentó mucho haber tenido que cancelar sus conciertos pues le apetecía mucho encontrarse con su público y pidió perdón a quienes tuvieran ya las entradas.
Problemas de salud mental
Esta escapada con su novia era precisamente una manera de alejarse del ajetreo y recuperarse. Desgraciadamente, dadas las informaciones, no ha sido así. Este verano el que fuera componente de One Direction se sinceró acerca de los problemas de salud mental que ha afrontado a lo largo de su vida. Contó que los médicos le diagnosticaron de algunas patologías después de pasar algo de tiempo en una clínica de bienestar en Estados Unidos. Fue el año pasado cuando “tocó fondo”, un sufrimiento del que fueron testigos familiares y amigos. En sus perfiles, Liam contó a sus seguidores que ha tenido episodios maníacos en su vida y que le cuesta mantenerse sobrio durante sus momentos más complicados.
En esta búsqueda de ayuda Liam cuenta con el apoyo incomparable de su hijo Bear, de seis años, y su expareja Cheryl Tweedy, madre del pequeño, además del de sus excompañeros de banda, Harry Styles, Niall Horan, Louis Tomlinson y Zayn Malik, que acudieron “al rescate”. A ellos se une Kate Cassidy, de 23 años, la influencer que le conquistó hace un año después de que rompiera su compromiso con la modelo Maya Henry en la primavera de 2022 (unas imágenes del artista con otra mujer provocaron la separación).