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El estado de salud de María Jiménez era muy delicado y este jueves la artista ha fallecido a los 73 años en el Hospital Infanta Luisa de Sevilla, al que acudió el martes para hacerse una revisión. Sus restos mortales han sido trasladados en un primer momento al tanatorio de la SE-30 de Sevilla y de ahí al Ayuntamiento de la capital andaluza, donde se ha instalado la capilla ardiente, que permanecerá abierta hasta las 22:00 horas de este jueves. El viernes se abrirá de nuevo, de 8:00 horas a 10:00 horas, momento en el que se cerrará y el féretro de la artista será trasladado hasta la iglesia de Santa Ana en Triana, donde a las 11:30 horas se celebrará una misa en su memoria.
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- El golpe más duro para María Jiménez: la muerte de su hija a los 16 años
Antes de marcharse, la cantante diseñó su propia despedida. Quería que pasearan su féretro en un coche de caballos por su querida Triana y así se lo ha transmitido la familia a José Luis Sanz, alcalde de Sevilla. El consistorio no ha puesto ningún problema y ya tiene todo preparado para dar el último adiós a la artista, que seguramente será multitudinario. El traslado del féretro desde el Ayuntamiento de Sevilla a la iglesia de Santa Ana se va a realizar en coche de caballos como ella deseaba, al igual que el que se realizará hasta el cementerio de San Fernando tras la misa, donde reposarán para siempre sus restos junto a los de su madre y su hija María del Rocío.
María Jiménez nació el 3 de febrero de 1950 en el barrio de Triana, en la calle Betis, y por esa zona paseará el viernes por última vez en un coche de caballos. "Espero que esté conforme con todo porque sino me va a mandar a tomar por saco", ha dicho su hijo Alejandro entre risas al contar los detalles de la despedida.
- Familiares, amigos y una legión de fans despiden a la inolvidable María Jiménez
La capilla ardiente también ha sido decorada por la diseñadora Aurora Gaviño siguiendo las indicaciones de la artista. María había elegido la foto que quería que apareciera en un momento así y había pedido expresamente a su amiga que pusiera el mantón chinesco de su madre sobre el féretro. Además, pidió que se pusiera incienso durante su velatorio para que toda la sala oliera a Sevilla.
El alcade de Sevilla, José Luis Sanz, ha mostrado sus condolencias a la familia de la artista y, en un mensaje difundido en sus redes sociales, ha dado su adiós a la intérprete de canciones tan conocidas como Se acabó o La lista de la compra. "Trianera universal y sevillana de raza. Con María Jiménez despedimos a una artista que marcó toda una época. Sevilla tiene el honor de tenerla como Medalla de Oro de esta ciudad que la recordará siempre, al igual que lo hará toda España. Descanse en paz", ha escrito. Además, ha confirmado que la cantante tendrá un espacio público con su nombre en su barrio de toda la vida.
Alejandro, por su parte, ha pedido a todo el mundo que todo el mundo recuerde a su madre con una gran sonrisa. "Que todo el mundo levante su copa esta noche, brinden por ella y escuchen su música, es lo que yo voy a hacer", ha dicho antes de acceder a la capilla ardiente. Horas antes, era el encargado de comunicar la muerte de la artista a través de este comunicado: "Con profunda tristeza y dolor en nuestros corazones, despedimos hoy a María Jiménez, mujer amada y respetada por su compromiso inquebrantable con su familia, amigos, y admiradores. Un espíritu indomable, una personalidad arrolladora, una mujer fuerte y valiente que luchó contra todas las adversidades más allá de lo imaginable".
Primeras palabras de Alejandro, el hijo de María Jiménez