Hoy 1 de septiembre, el futbolista Sergio Rico cumple 30 cumpleaños. Un día muy especial para celebrar junto a su mujer, Alba Silva, y su familia, cuando se cumplen dos semanas desde que recibiera el alta hospitalaria, tras pasar tres meses ingresado después de su gravísimo accidente ecuestre en la aldea de El Rocío.
El portero del PSG continúa su recuperación en Sevilla con un programa intenso de rehabilitación mañana y tarde y ante la duda de si podrá volver a los terrenos de juego. Ahora lleva 15 días en su casa, recuperándose, llevando una vida tranquila lejos de París, donde la pareja ha dejado el piso que tenían alquilado en la capital francesa, donde residían, y de momento están totalmente centrados en la recuperación del guardameta, según afirma Vanitatis.
Secuelas psicológicas
La normalidad va poco a poco volviendo al hogar de Sergio Rico ya que su evolución es muy positiva aunque se trata de una experiencia que ha marcado también a la esposa del deportista. Alba Silva se pronució hace unos días sobre las secuelas psicológicas que le han quedado y cómo está gestionando esta complicada situación.
La empresaria andaluza se siente muy agradecida por las innumerables muestras de cariño que le ha estado llegando a través de las redes sociales. Es por eso ha querido sincerarse con las personas que han estado tan pendientes y ha explicado cómo se siente. "Estoy bien, aunque bastante sensible. Siento que aún tengo que recuperarme mucho mentalmente, estoy en terapia y me ayuda bastante, pero necesito tiempo para asimilar todo lo que ha pasado en los últimos meses, aún sabiendo que está más o menos todo controlado", ha indicado. Además, reconoce que sigue "teniendo muchas ganas de llorar todo el rato” a pesar de que Sergio se encuentra mucho mejor.
Con ganas de volver a los terrenos de juego
Uno de los aprendizajes que saca Alba de este obstáculo que su marido ha logrado superar es que "lo importante es no desistir y no perder la esperanza, los milagros existen". Además, tiene la certeza de que el amor todo lo cura y ha demostrado que forma junto al guardameta del PSG un equipo invencible. Ambos están volcados en la evolución de Sergio y se centran en el presente, además el jugador sí reconocía al ser dado de alta que espera "estar disponible dentro de poco" y volver a la competición, en la que cuenta con el apoyo de sus compañeros, quienes han demostrado que la amistad está muy por encima de los colores y el escudo.