Este martes a las 5.30 de la mañana, hora local de España, ha tenido lugar en Tailandia una rueda de prensa en la que la policía del país asiático ha querido esclarecer los principales puntos sobre el caso de Dani Sancho, acusado de asesinar y descuartizar a su compañero de viaje Edwin Arrieta, un cirujano plástico colombiano de 44 años.
Desde la comisaría de Koh Phangan, la isla del sur de Tailandia donde se cometió el crimen hace una semana, el subdirector de la policía tailandesa, Surachate Hakparn, ha asegurado que la investigación sobre el caso ya se ha concluido. De la misma manera, ha detallado que la muerte del médico no fue un accidente, sino que el hijo de Rodolfo Sancho fue el autor de un crimen premeditado, puesto que había comprado las herramientas necesarias para llevar a cabo sus planes con antelación. Esto significa que el cocinero se enfrentará a la pena de muerte cuando sea juzgado. Ahora será el fiscal quién estudie el caso y establezca que condena que se le aplicará a Daniel.
Carmen Balfagón, abogada de Rodolfo Sancho, cuenta lo mal que lo está pasando toda la familia
Por el momento, las autoridades desconocen cuál fue la causa concreta de la muerte de Edwin Arrieta. Porque aunque Daniel Sancho confirmó que apuñaló a la víctima en la parte derecha del pecho (también han hallado la camiseta que llevaba el cirujano con esta zona desgarrada), no se sabe si fue este apuñalamiento o el posterior golpe en la cabeza lo que acabó con su vida. Tampoco se ha encontrado el arma homicida.
Lo que sí han descartado por completo es que el nieto del protagonista de Curro Jiménez tuviese la ayuda de un cómplice. “No puede haber otro implicado porque no hemos encontrado imágenes en las cámaras de seguridad ni restos de ADN de otras personas”.
El motivo por el que Rodolfo Sancho no tiene previsto viajar a Tailandia en los próximos días
A través de paneles informativos en los que aparecían distintas imágenes, los agentes del orden han mostrado cómo han reconstruido los hechos y recopilado las pruebas. Unos retratos en los que se podía ver al cocinero en un segundo establecimiento adquiriendo otro cuchillo o escenificando el momento del crimen. Además, según la policía, el móvil que llevó a Daniel a cometer el asesinato era poder finalizar su relación con Edwin Arrieta, algo a lo que el cirujano se negaba.
De lo que no se ha comentado nada es sobre los supuestos mensajes con amenazas de muerte que Daniel asegura que Edwin le había mandado en los últimos meses. La policía, simplemente, se ha limitado a contestar que el teléfono del cirujano aún no ha aparecido.