Cayetano Martínez de Irujo, el otro gran apoyo de Genoveva Casanova en su momento más complicado

“Cayetano y yo hablamos todos los días”, nos desvelaba hace tan solo unos meses  Genoveva Casanova . La mexicana ha vivido uno de los episodios más complicados de su vida hasta el día de hoy tras sufrir una embolia pulmonar, que le causó un infarto pulmonar y un derrame, tal y como ha podido saber ¡HOLA! La exmujer de Cayetano Martínez de Irujo permaneció ocho días ingresada en el Hospital Universitario Moncloa donde fue fotografiada a su salida en compañía de su hija, Amina, de 22 años, su apoyo incondicional en estos momentos de recuperación.

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En estos momentos tan difíciles, la mexicana no ha estado sola, sino que ha contado con la compañía de sus hijos y, como no podía ser de otra manera, con el apoyo del duque de Arjona, su exmarido, que también ha estado volcado con su exmujer y muy pendiente de su evolución. Y no es de extrañar. Desde que pusieron punto y final a su relación sentimental, ambos han seguido siendo una familia y han estado más que involucrados en la educación de sus hijos. Además, en más de una ocasión, ambos han desvelado la magnífica relación que tienen.

Hace tan solo unos meses, antes de este gran susto para Genoveva, era ella misma la que nos contaba, en exclusiva, su verdadera relación con el padre de sus hijos, al que considera un pilar fundamental en su vida, a pesar de haber tomado caminos diferentes. “He tenido parejas y él tiene ahora mismo. Yo creo que lo que pasa es que son tipos de amor diferentes, ¿no? Para mí, Cayetano es mi familia. Es mi pilar. Somos los dos pilares de una familia de cuatro”, nos confesaba Casanova.

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¿El secreto de esta unión familiar? No juzgarse el uno al otro como expareja. “Ponemos el amor por encima de todo. Nos la pasamos juzgando a los demás, en vez de nosotros pensar más en lo que tenemos que dar al otro. “Tú no me hiciste feliz”, “tú no me cuidaste…” y, cuando uno se divorcia, es muy fácil caer en eso”, nos contaba la mexicana.

No cabe duda que la vida de Genoveva ha dado un giro de ciento ochenta grados y, que ahora, disfrutará su vida aún más si cabe rodeada de los suyos. Nos cuentan sus allegados, además, que el ingreso fue de tal gravedad que, de haber esperado, las consecuencias hubieran sido mucho peores. Es un momento crucial para ella, un tiempo de “reflexión” para recuperar fuerzas y, seguro, que el hijo de la duquesa de Alba está al pié del cañón para ayudar a su exmujer.

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