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Los dos niños que tiene Hiba Abouk son su máxima prioridad y disfruta al máximo cada instante que pasa a su lado. Amín (3) y Naím (1) son el gran motor de la actriz, que disfruta con los pequeños de su primer verano tras separarse de Achrah Hakimi, con el que se casó en secreto. En esta etapa estival marcada por los cambios, la actriz ha elegido su Túnez natal, un destino que le permite conectar con sus raíces y que sus hijos conozcan también esta parte que está marcada en su ADN. En el país de África del Norte se aloja en The Orangers Garden, un resort de villas y bungalows de cinco estrellas.
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Inaugurado en 2018, el hotel tiene unos impresionantes jardines de cinco hectáreas con naranjos, flores de jazmín y palmeras, además de vistas a las características playas del Mediterráneo. Las habitaciones, que van desde los 38 a los 154 metros cuadrados. Las suites cuentan con un dormitorio, cuarto de baño con ducha y bañera, WC separado, sala de estar, comedor, terraza y la posibilidad de un segundo dormitorio.
En las instalaciones dedicadas al ocio y bienestar, el hotel incluye pista de tenis, petanca, voley playa, golf, tiro con arco y equitación. Además, se pueden disponer de motos acuáticas para surcar el mar y practicar aqua fitness. Muy cerca hay dos campos de golf, Citrus y Yasmine. Para los ratos de calma y desconexión hay dos hammam, una sauna, una zona para masajes y pedicura, una sala de fitness para seguir adelante con la rutina de entrenamientos. También hay cuatro piscinas, una de ellas infantiles y otra infinita, y un club de niños que ofrece servicio de niñera.
La oferta gastronómica es muy amplia y se divide en ocho establecimientos en los que se ofrecen platos típicos de la cocina tunecina, mediterránea, asiática, italiana... Uno de los restaurantes está en la terraza, un Roof top con privilegiadas vistas, y también hay un beach club solo para los bungalows en el que se sirve la comida en mesas instaladas entre las tumbonas. No falta el tradicional chiringuito en el que tomar cócteles junto al agua.
El hotel, traducido al castellano como El jardín de los naranjos, se encuentra a 4 kilómetros del centro de la ciudad, donde se encuentran lugares de interés como la antigua kasbah de Hammamet, una fortaleza construida en el siglo IX que fue modificada seis siglos después para convertirse en la residencia del gobernador de la ciudad tunecina.
La felicidad de Hiba con sus pequeños
Para Hiba, ser madre es un sueño cumplido y no puede sentirse más plena junto a sus pequeños, en los que se ha refugiado tras las difíciles circunstancias en las que se conoció su ruptura de Hakimi, jugador de La Roja. "Cualquier cosa que haga con ellos es una maravilla. Sin duda ser madre es la tarea más dura del mundo, y también es ser hogar, sinceridad, calma, entregarse y amar incondicionalmente (entre tantas otras cosas). Le doy gracias a la vida por darme dos hijos tan bellos y con salud. Y le doy gracias eternamente a mis niños, Amín y Naím, por haberme elegido para ser su madre y hacerme feliz día a día. Sois lo más importante de mi vida. Por vosotros lo que sea, os quiero siempre", aseguraba la protagonista de El Príncipe.