Alexandra de Hannover está en uno de los mejores momentos de su vida y disfruta de todo a lo grande junto a su novio, Ben-Sylvester Strautmann. Llevan casi siete años, parece que lo suyo es para siempre y no fallan en sus tradiciones de pareja. Por eso siempre desembarcan los primeros en la Costa Azul con su inseparable perrito. Son sus vacaciones para dos en Saint-Tropez, uno de sus destinos preferidos, antes de que la princesa Carolina ponga en marcha la agenda familiar de verano en su barco, el ya legendario Pacha III.
Alexandra, que cumplirá 24 años el 20 de julio, y Ben-Sylvester, de la misma edad, se conocieron en noviembre de 2016, en una carrera solidaria; hicieron su primera aparición juntos, en un acto deportivo, en 2017, y, un año después, formalizaron su relación en el Baile de la Rosa.
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El que se espera se convierta en yerno de la princesa Carolina es de origen alemán, pero creció en Mónaco. El destino que eligieron sus padres, Joachim y Sabine, para dedicarse al sector de la banca, tras amasar una gran fortuna con el comercio de maquinaria agrícola en Bad Laer, ciudad de la Baja Sajonia, donde enraízan también los Hannover. Ben-Sylvester ha estudiado Administración de Empresas, en Londres, y la princesa Alexandra, Ciencias Políticas y Filosofía, en Nueva York. Es una lectora voraz, como su hermana, Carlota Casiraghi, y en el futuro le gustaría trabajar en algo relacionado con el arte o la moda.