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El 15 de julio de 1997 ha quedado grabado para siempre en la memoria colectiva del mundo de la moda, pero muy especialmente, en la familia de Gianni Versace. Fue en aquella jornada, a primera hora de la mañana, cuando el modista perdió la vida a manos de Andrew Cunanan, que le disparó a sangre fría a las puertas de su residencia en Miami.
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Su hermana menor, Donatella Versace, ha querido recordar su figura. Lo ha hecho con una serie de fotografías en blanco y negro que ha compartido en su perfil público junto a unas emotivas palabras. "Gianni, hoy y cada día, pienso en la época en la que tenía la suerte de poder pasar tiempo contigo. Parece que fue ayer", ha escrito. En las imágenes se ve a los dos hermanos sonriendo y en actitud cómplice, sentados en torno a una mesa tras un almuerzo en su residencia.
Una muerte inesperada que conmocionó al mundo
Aquel caluroso día del mes de julio, Gianni Versace fue asesinado a pocos metros de su casa. El modista que en aquella época vivía en Miami, solía madrugar para poder salir a comprar la prensa y desayunar tranquilamente mientras se ponía al día. Sin embargo, esa mañana de julio nada ocurrió como de costumbre. Salió de su residencia y compró los periódicos, pero antes de que pudiera abrir la cerradura de su casa, un hombre se acercó a él por detrás y le puso una pistola en la cabeza. Disparó dos veces y las balas le hirieron de gravedad en el cuello y la nuca. Eran las 8:40 de la mañana cuando las escaleras de la fabulosa mansión se tiñeron de sangre.
El cuerpo del diseñador fue encontrado por su entonces pareja, Antonio D'Amico, y uno de los empleados de Gianni Versace, el chef Charles Podesta. Aunque le trasladaron al hospital de manera lo más rápida posible, no se pudo hacer nada por la vida del italiano, que falleció en el Jackson Memorial Hospital de Miami.
Poco después llegó la policía para comenzar con la investigación y hablar con el entorno del italiano y la única persona que presenció el crimen. Se trataba de Merisha Colakovic, que relató a las autoridades que el autor había sido un hombre vestido con camiseta, pantalón corto, zapatillas, gorra y una mochila al hombro. Una descripción que encajaba con Andrew Cunanan, pero que, en un principio, llevó a la detención del hijo de Andrés Pajares.
En una carrera desesperada por localizar al autor de la muerte de Versace, la policía detuvo a Andrés Burguera, que se encontraba en Nueva York y que tenía, al parecer, cierto parecido con el verdadero asesino. Además, por entonces, Burguera se hacía llamar Andrew, lo que fomentó la confusión. En unas declaraciones al diario El Mundo, el hijo de Pajares explicó que fue una experiencia traumática para él, aunque finalmente las autoridades se disculparon y le otorgaron una tarjeta de residencia en Estados Unidos.
El responsable de la muerte de Versace se había marchado caminando por Ocean Drive tras disparar al modista y fue encontrado varios días después por la policía en una casa flotante. Ante la presencia de los agentes, Cunanan se vio sin salida y decidió pegarse un tiro.
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Para Cunanan, que se encontraba en la lista de los diez fugitivos más buscados, no era el primer asesinato. Tal como pudo comprobar el FBI, había matado a tres hombres más en diferentes partes del país. También se descubrió que conoció a Versace en una discoteca y se obsesionó con él, aunque hay otra versión que apunta a que en realidad estaba obsesionado con un amante del diseñador. Una de las teorías sobre el asesinato que más titulares acaparó era que se trataba de un ajuste de cuentas por parte de la mafia calabresa, aunque nunca llegó a probarse. En realidad, nunca se dio con el móvil del crimen.
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Donatella, la guardiana de su legado
La muerte del diseñador a los 50 años conmocionó al mundo. A sus entierro acudieron algunos de los rostros más conocidos del panorama internacional como Diana de Gales, Elton John, Karl Lagerfeld, Valentino, Giorgio Armani, Naomi Campbell, Eva Herzigova, Carla Bruni o Valeria Mazza, entre otras.
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Un año antes de su muerte, al modista le diagnosticaron un cáncer de oído, por lo que decidió hacer testamento y nombrar a su sobrina Allegra heredera del 50 por ciento de todos sus bienes. Asimismo, dejó a su sobrino Daniel su impresionante colección de arte. Fue Donatella la que tomó las riendas de la firma tras el fallecimiento de Versace y tuvo que afrontar muchas dificultades iniciales. No obstante, a pesar de todo, gracias al duro trabajo de Donatella y a sus meditadas decisiones, desde hace más de una década que la marca ha vuelto a brillar con luz propia. Ella sigue a día de hoy al frente del imperio.
Naomi Campbell también recuerda a uno de sus grandes amigos
Donatella no ha sido la única que ha recordado al modista en este triste aniversario, También Naomi Campbell, que fue una de sus musas además de una de sus grandes amigas, ha compartido en su perfil público una serie de instantáneas junto a Gianni Versace. Una secuencia con la que ha evocado la especial amistad que existía entre ambos y que ha acompañado de unas bonitas palabras: "26 años ya…No pasa un día sin que te recuerde…te echo de menos, estarán siempre en mi corazón", ha escrito.