La última emisión de Sálvame Deluxe ha estado cargada de momentos emotivos y muchas sorpresas y, entre otras muchas cosas, nos ha permitido conocer detalles hasta ahora desconocidos de una de las figuras más emblemáticas del programa: Conchita Pérez, la poligrafista. Este viernes, era ella quien se sentaba en la silla de los entrevistados y mantenía una simpática conversación con María Patiño y Terelu Campos, que han ejercido de maestras de ceremonias en esta despedida del programa.
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Vestida con un favorecedor estilismo en color fucsia, la poligrafista ha desvelado algunos detalles de su vida. Nacida en Zaragoza y devota de la Virgen de El Pilar y de la Hermandad de la Gota de Leche, Conchita suele ser parca en palabras, pero esta vez ha hablado mucho más de lo habitual. Trabajadora incansable, en alguna ocasión ha llegado a hacer hasta tres polígrafos en una noche y solo se ha ausentado del plató una vez, por cuestiones que nunca han trascendido.
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En su conversación con Terelu Campos y María Patiño, Conchita ha revelado que es la menor de cuatro hermanos, todos varones. Aunque siempre ha estado muy volcada en su familia, lo cierto es que, tal como ha contado ella misma, ha vivido su vida de una manera diferente a lo que se inculcaba en la sociedad. La poligrafista no ha estado casada nunca, ni ha convivido con una pareja y, de alguna manera, ha desafiado las convenciones de su tiempo: "En mi generación acabas la carrera, te casas, y tienes hijos. No hice eso, monté empresas, trabajar y hacer lo que me gustaba. Tuve la suerte de poder hacer lo que me gustaba y sigo haciéndolo".
La que es, sin duda, una de las figuras más emblemáticas del Deluxe, también confesaba que empezó con el polígrafo de manera casual, cuando ya se iba a jubilar, porque creía que era una buena manera de ayudar a las personas a salir de dudas en situaciones en las que había ocurrido algo que no se podía demostrar de otra forma.
Conchita no ha dudado en dedicar unas palabras de agradecimiento a las personas que favorecieron su entrada en Mediaset (Yolanda, José Muro y David Valldeperas), aunque ha recalcado que su llegada a la televisión fue algo totalmente casual, cuando le fueron a hacer una entrevista para una publicación y coincidió que Yolanda escuchó a Conchita y llamó a José Muro. Ese fue el principio de su carrera televisiva.
La poligrafista ha explicado también cuáles son sus aficiones. Ella disfruta mucho yendo a esquiar o a la playa a tomar el sol, aunque para eso tenga que hacer un viaje de más de dos horas en el día. Durante su larga etapa en Sálvame Deluxe, Conchita ha contado que nadie ha coqueteado con ella en este tiempo porque ya llegó "mayor" al programa, pero sí ha insinuado que hubo alguien que le gustó y por el que sentía atracción física. A pesar de la insistencia de María Patiño, la poligrafista no quiso entrar en muchos detalles. Eso sí, confesó que era alguien del equipo del programa, gay y no demasiado joven.
Al final de la entrevista, Kiko Matamoros sorprendía a Conchita con un inesperado regalo y es que, en nombre de todo el equipo le ha obsequiado con uno de los carteles con el nombre del programa. "Es el regalo más bonito que podíamos encontrar para ti", ha asegurado el colaborador al entregárselo antes de despedirse. Por su parte, Carmen Borrego le ha dicho que se lleva muchos secretos de todos, tantos como para escribir un libro.