La graduación de Irene Urdangarin el día 16 de junio en Suiza fue el primer cara a cara público del exjugador de balonmano con los Reyes don Juan Carlos y Doña Sofía. Un reencuentro inesperado que generó enorme expectación. No se habían visto desde el 15 de enero de 2018, justo en este mismo país, cuando viajaron a Ginebra para asistir al 50 cumpleaños de Iñaki. La reina Sofía volvería a reunir a toda la familia en La Zarzuela -incluidos los Reyes y sus dos hijas- diez meses después, por su ochenta cumpleaños, pero Iñaki llevaba ya cinco meses cumpliendo condena en la cárcel de Brieva.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Don Juan Carlos puede estar enfadado con Iñaki por varias razones, pero hay una que es segura: el cómo ha tratado a su hija Cristina, que apostó todo por él y acabó siendo la persona que más le ha fallado en la vida.
Verla sufrir le dolió muchísimo. El exjefe del Estado supo de las fotografías de Iñaki de la mano de otra mujer, Ainhoa Armentia, en Abu Dabi, horas antes de que salieran publicadas y para él también fue un shock. Lo llamó su hija, que ya sabía que se trataba de una compañera de oficina, y le faltó tiempo para viajar a Emiratos Árabes Unidos. Atravesaba uno de los momentos más difíciles de su vida, necesitaba consuelo, consejo y apoyo, y lo buscó en brazos de su padre.
No son los mejores amigos y la paz entre suegro y yerno (todavía) no está firmada (ni lo estará), pero con la tormenta amainada se priorizan otros hechos y sentimientos porque, al final, padres y abuelos quieren los mismo: que Juan, Pablo, Miguel e Irene estén bien, se sientan seguros (aunque ya son mayores) y puedan contar con todos en su día a día y en sus momentos especiales.
Hace años que la relación se vino abajo, pero Don Juan Carlos e Iñaki saben que están obligados a entenderse por el bien de la generación más joven. Y, además de una manera creíble. Y ese es el ‘esfuerzo’ que ha hecho el exjefe de Estado en este último viaje: él también tiene presente el papel que ha tenido Iñaki en la vida de sus hijos, que lo adoran.
En este apartado coinciden todos. Nadie que haya vivido de cerca el día a día de la familia puede dejar de valorar e incluso premiar el papel de Iñaki como padre, tanto en los años felices, como en los tiempos más oscuros y difíciles. Y esto es, en cierto sentido, lo que lo ha ‘salvado’. Sus hijos tiran de él, desean lo mejor para él, sigue siendo el padre querido , y el resto de la familia se apunta porque ellos son lo primero.
Los han protegido al máximo, pero han sufrido mucho, desde que saltó el caso Noos; y tampoco ha sido fácil gestionar que Iñaki se haya ido con otra mujer traicionando a su madre. Cuando se las prometían felices y la vuelta a la normalidad estaba en camino, todo saltó por los aires.
No se les vio juntos en público, pero sí compartieron tiempo en privado y todo transcurrió con normalidad, aunque se mantuvieron las distancias. En la graduación de Irene, don Juan Carlos y doña Sofía se sentaron justo enfrente de sus hijas -Iñaki estaba en la segunda fila- y nietos. Fue un acto privado y entrañable que culminó con una cena en el restaurante italiano Il Lago del hotel Four Seasons en el que se quedó toda la familia; y diferentes planes familiares de sábado. Y, en privado se saludaron, charlaron (poco) y compartieron mesa, aunque con la generación más joven de por medio.
Un año y medio después de que el matrimonio se separara de hecho, podría decirse que la relación de Iñaki ha ido a mejor con la infanta Cristina, y de alguna manera con don Juan Carlos y el divorcio, para el que sólo falta poner una fecha, tampoco va a cambiar el escenario cuando vuelvan a unirse todos en otras citas familiares.
Todo está hablado y pactado. Y, aunque diferentes informaciones apuntan a que don Juan Carlos ha estado detrás de los pasos que ha dado la Infanta e Iñaki Urdangarin hacia la disolución del matrimonio, fuentes muy cercanas a la familia Urdangarin han confirmado a ¡HOLA! que “no se ha metido en nada”, más allá de apoyar a su hija doña Cristina emocionalmente y de ayudarle a elegir un abogado. También, que el tema (divorcio) no se tocó durante los días que pasaron juntos en Ginebra porque no era el momento.