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villota© Imagen en Acción

La gala benéfica María de Villota x Aniversario perpetúa el sueño de la piloto

El Circuito de Madrid Jarama-Race ha acogido este evento benéfico


Actualizado 22 de junio de 2023 - 20:03 CEST

Diez años después del triste fallecimiento de María de Villota, su familia y amigos siguen dando pasos para hacer eterno su legado. El 16 de junio el Cirucuito de Madrid Jarama-Race acogió la gala benéfica María de Villota X Aniversario para honrar a una deportista que rompió barreras en un mundo de hombres y que fuera de la competición dedicó todos sus esfuerzos a ayudar a los demás.

Gala benéfica María de Villota X Aniversario© Imagen en Acción

El evento, presentado por el periodista Jota Abril, contó con la participación de 270 personalidades del mundo del deporte que quisieron aportar su granito de arena al programa que creó María un año antes de morir: 'Primera Estrella'. Se trata de una iniciativa desarrollada en 2012 para la Fundación Ana Carolina Díez Mahou que nació con el objetivo de mejorar la caidad de vida de los niños y jóvenes con enfermedades neuromusculares y mitocondriales.

Gala benéfica María de Villota X Aniversario© Imagen en Acción

Las familias de muchos de estos pacientes que se han beneficiado del programa han enviado mensajes de agradecimiento en una noche en la que también se homenajeó a más de 40 personas especiales en la vida de María de Villota. Sin duda, la gala, que ha estado amenizada por la música del violinista Pablo Navarro, ha sido todo un éxito ya que gracias a la recaudación obtenida se podrán financiar un total de 700 nuevos tratamientos. 

 

Gala benéfica María de Villota X Aniversario© Imagen en Acción

 

María, Hija de Emilio de Villota, el primer y legendario piloto español de Fórmula 1, logró lo que ninguna mujer española había conseguido jamás: pilotar un Fórmula 1. Escalón tras escalón, logró demostrar a escépticos, aficionados y profesionales, que era perfectamente capaz de llegar a lo más alto en el competitivo mundo del automovilismo. Sin embargo, un fatal accidente en el aeródromo de Duxford le costó el ojo derecho y truncó su carrera, pero se erigió como todo un ejemplo de fortaleza y superación. La piloto falleció un año y medio después, a los 33 años, debido a la gravedad de sus heridas. Desde entonces, su familia y allegados se han volcado en continuar su legado.