El verano ha comenzado oficialmente para Luis Enrique (53), que ha puesto rumbo a las islas Baleares para disfrutar de unos días de desconexión en compañía de su esposa, Elena Cullell, con la que el pasado mes de diciembre celebraba sus bodas de plata. Se trata de un verano diferente para el entrenador ya que su futuro está en el aire y se espera que en los próximos días puedan resolverse todas las incógnitas. Tras cerrar su etapa como seleccionador de La Roja, cargo en el que le ha sucedido Luis de la Fuente al finalizar el Mundial de Qatar, podría mudarse a Francia.
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Suena con fuerza la posibilidad de que Lucho, como llaman al deportista asturiano, se ponga al frente del Paris Saint-Germain tras la marcha de Christophe Galtier. De llegar finalmente a un acuerdo, tendría que estar en la capital gala el próximo 4 de julio, día en el que el equipo está citado para comenzar con la pretemporada y los entrenamientos. Del club forman parte otros nombres españoles como Sergio Rico, quien continúa ingresado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla tras el grave accidente ecuestre que sufrió en El Rocío, y Achraf Hakimi, quien ya ha trabajado bajo las órdenes de Luis Enrique en la Selección española.
Mientras cierra los flecos de sus próximos pasos profesionales, el que fuera jugador del Sporting de Gijón y del FC Barcelona descansa con su gran apoyo, quien ha estado a su lado a lo largo de su larga y exitosa carrera deportiva, siempre discreta y apostando por un segundo plano. Juntos han sido fotografiados en el mar, compartiendo confidencias y haciendo frente a las altas temperaturas desde aguas baleares. Mientras que Luis Enrique elegía un bañador malva para su día de playa, Elena se decantaba por un bañador negro asimétrico y una pamela para resguardarse del sol.
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Con ropa cómoda, gorra bicolor y los cascos puestos, el que fuera jugador del Sporting de Gijón y del FC Barcelona fue fotografiado durante el fin de semana llegando al puerto de Ibiza, desde donde salen los ferrys directos a Formentera. Esta isla es su segundo hogar ya que, tras muchos años eligiéndola como destino estival, el pasado año adquirió su propia vivienda y ya la disfrutó en compañía de la familia. Luis Enrique suele aprovechar sus estancias en este paradisiaco rincón para disfrutar de otra de sus aficiones, el ciclismo, y sale a montar en bici por la naturaleza.
Un momento de cambios
Luis Enrique y su familia, que tienen su residencia fijada en Barcelona, están en una etapa de cambios. Más allá de los planes del exjugador, su hija también vive un verano diferente, marcado por su reciente ruptura de Ferrán Torres. La amazona y el jugador del Barça, que hicieron oficial su romance a comienzos de 2022 y el verano pasado se divirtieron juntos en Formentera, han tomado caminos diferentes después de dos años de relación. Por el momento, ninguno de los dos se ha pronunciado al respecto y están volcados en sus respectivas carreras profesionales.