A Irene le encanta Barcelona y en cuanto puede se escapa de Ginebra. Aunque no ha vivido casi en España, tiene a su pandilla del Liceo Francés, además de a su hermano Pablo, al que está muy unida, y a los primos Gui Urdangarín. Celebraba su mayoría de edad (5 de junio) y, después de la última visita que hizo con la infanta Cristina, volvió a viajar a la Ciudad Condal para festejar su 18 cumpleaños con su padre y disfrutar del último partido de Pablo y, además, con sorpresa.
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Sabíamos que Irene y Johanna Zott, la novia de Pablo, se conocieron en el Liceo Francés, pero no se esperaba verlas juntas ‘uniendo’ a las dos familias. Por un lado, los Urdangarín y por otro, los padres de la joven, Chris Zott y Elena Sophie, y sus dos hermanas.
Celebraron los goles de Pablo entusiasmadas y con corazones: Irene llevó un folio con su nombre y su número, el 77, y Johanna, la camiseta del Barça que le regaló su novio
Las imágenes, llenas de complicidad, nos trasladan que se conocen y se tratan; y, también, nos muestran ese lado de Irene más desconocido: alegre, divertida, espontánea, haciendo fotos, compartiendo bromas con su padre, y mostrándose como una auténtica fan de su hermano junto a Johanna, que también dibujaba corazones con su mano.
Pablo jugaba su último partido de la Liga ASOBAL en las filas del F. C. Barcelona, en el que ha militado las dos últimas temporadas —la primera, en el equipo B—, que se proclamó campeón. Imparable en su carrera deportiva, fue el máximo goleador en este partido junto a dos compañeros —anotaron seis tantos cada uno— y su destacable actuación no pudo estar más celebrada por la grada del Palau. De manera más entusiasta por su novia y por su hermana, pero también por Iñaki, el orgulloso padre al que su hijo miraba en cada una de sus buenas jugadas haciendo la señal de triunfo.
No fue este el último compromiso deportivo de Pablo con los azulgranas. Al cierre de esta edición, el hijo de la infanta Cristina tenía pendiente disputar (17 y 18 de junio) la Final Four de la EHF Champions League 22/23, en la ciudad alemana de Colonia. Una cita que abre el interrogante de si podrá estar o no al lado de Irene el próximo día 16, fecha en la que su hermana protagonizará una doble celebración de aniversario y graduación junto a su familia, incluida la Reina Sofía.
Pablo jugará la próxima temporada con el Granollers, uno de los fuertes de la liga, en el que podrá contar con más minutos de juego que en su anterior equipo. Una nueva experiencia para el joven de 22 años, que, según algunos expertos, podría superar los éxitos alcanzados por su padre, quien formó parte del famoso ‘dream team’ del F. C. Barcelona de balonmano y logró con la selección española dos medallas olímpicas y un campeonato de Europa.
Johanna disfrutó del partido de Pablo con sus padres y sus hermanas y se vio a las dos familias muy integradas