La vida de Anabel Alonso dio un giro inesperado hace diez años, cuando se puso a las órdenes de la directora argentina Heidi Steinhardt en la obra de teatro Lastres. Aquella relación laboral dio paso a una bonita historia de amor con la llegada de su hijo Igor el 24 de mayo de 2020. La actriz tenía en aquel momento 55 años y su pareja 42, por eso fue la dramaturga quien asumió la gestación del bebé. Según contó Anabel en ¡HOLA!, el niño "es maravilloso". "No es especialmente guerrero. Es inquieto, es ruidoso, pero es lo que es. No es llorón ni esas cosas. Lo que pasa es que requiere atención", declaró emocionada. La intérprete está "entregada" por completo al niño. "Hago mucho el payaso con él. Conmigo, el enano se ahoga de risa. Espero hacerme respetar un poco más adelante", bromeó.
Meses después del nacimiento de Igor, Anabel y Heidi pronunciaron el 'sí, quiero' en la más absoluta intimidad, pero con la presencia del pequeño. "Te tienes que adaptar a lo que hay, ya habrá tiempo de celebrarlo", dijo la actriz, pues en ese momento todavía había restricciones por la pandemia. "Pensábamos casarnos antes de que naciera el bebé, pero al final ha surgido así y lo importante es estar convencidas y enamoradas", añadió.
A la intérprete le hubiera gustado tener más hijos, sin embargo, ya ha deshechado esa idea porque su pareja correría un gran riesgo si intentase quedarse embarazada otra vez a los 45 años. En su día también se planteó adoptar, pero finalmente no inició el proceso por ser excesivamente laborioso. "Hay que parar y centrarse únicamente en ello, y son entre tres y cinco largos años, es muy complicado", reconoció.
Anabel está viviendo un etapa muy dulce, pero no siempre fue así. "Siempre he dicho soy hija única, y Heidi me ha hecho ver que no es cierto, soy la que queda y es más doloroso", desveló en una entrevista concedida al Deluxe en 2021. "Un año antes de nacer yo se murió mi hermano a los nueve años de un linfoma y cuando yo tenía dos años, mi hermana con diez de leucemia. Por eso digo que soy la que se quedó", explicó.
Esta tragedia marcó enormemente a su familia. "Tras la muerte de mis dos hermanos, mis padres tenían miedo de perderme a mí también. A mí me estuvieron haciendo análisis de sangre cada tres meses hasta los 17 años". A pesar del dolor, sus padres hicieron todo lo posible para que ella tuviera una infancia feliz. "No tengo un recuerdo de un hogar lúgubre y triste, me llevaban a la feria… pero a mi madre no la he oído cantar en la vida. Admiro a mis padres, mi madre está viva… cómo pudieron seguir adelante, criarme a mí y mantener la ilusión y no haber tirado la toalla. Y sobre todo en unos años que tenías que superar estas tragedias sin ayuda de nadie", reflexionó.
Anabel Alonso tiene una carrera de lo más extensa a sus espaldas. Lleva 35 años en el mundo de la interpretación y guarda un bonito recuerdo de la serie Los ladrones van a la oficina. "Me quedé sin palabras cuando me dijeron que Tito Fernández, el director de la serie, me quería a mí. Evidentemente, hubo un antes y un después. Los ladrones van a la oficina fue un despegue tremebundo para mí", dijo en ¡HOLA!. Ahora está de gira con la obra de teatro La Celestina y en los últimos años ha descubierto una nueva popularidad tras participar en Tu cara me suena, MasterChef Celebrity y la serie Amar es para siempre, que está preparando su final.
Conoce el ático dúplex de Anabel Alonso en el que vive con su pareja y su hijo