leticia rodr guez de la fuente© JEOSM

Acaba de publicar el libro ‘Tocar Tierra’

Leticia, la hija de Félix Rodríguez de la Fuente, nos habla de su nueva aventura literaria en su granja de flores

‘Para las personas creativas y malas gestoras, como es mi caso, la jardinería es el complemento perfecto para nuestras vidas’


30 de mayo de 2023 - 20:28 CEST

Con cuarenta años, llegó al mundo de las flores para quedarse y su nombre está dando mucho que hablar desde entonces. Leticia, hija del inolvidable Félix Rodríguez de la Fuente, se convirtió en una de las floristas más reputadas de nuestro país gracias a sus creaciones , llenas de color, buen gusto y elegancia.

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Estudió en Reino Unido y comenzó su andadura profesional en el mundo del arte, trabajando en la galería Elba Benítez y en la revista Art Forum. Su pasión por las flores la llevó a abrir una floristería en el mercado de Antón Martín. Pocos años después, y tras múltiples viajes a Inglaterra para estudiar con floristas como Paula Pryke y The Garden Gate Company y floricultoras como Rachel Siegfried, de Green and Gourgeous, empezó a cultivar sus propias flores en un terreno alquilado en la zona de Perales.

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La pasión por las flores ha llevado a abrir a Leticia una floristería en el mercado de Antón Martín.

Al poco tiempo decidió comprar su propia tierra y descubrió una joya en la vega del río Ungria, muy cerca de Brihuega (Guadalajara). Ahí empezó su nueva andadura como jardinera y floricultora, de la que habla en Tocar Tierra (Espasa), un relato a medio camino entre la reflexión personal de una mujer que ha creado algo único en España y los consejos prácticos para aprender a cultivar, hacer ramos o centros de flores, conocer las ventajas de cada tipo de flor y aprender a distinguirlas en todos sus detalles.

-Leticia, acabas de publicar tu primer libro, ¿te ha supuesto mucho vértigo meterte en el espeso bosque de las letras?

-Soy una lectora empedernida y le tengo mucho respeto a ese espeso bosque de las letras. Por eso no estuve segura de publicarlo hasta que pude comprobar que había producido algo digno.

-¿Cómo y cuándo surgió la idea?

-Este libro llevaba años escribiéndose y es ahora cuando ha encontrado su momento.

-¿Qué nos vamos a encontrar y cómo debemos afrontar la lectura de este libro?

-La historia de mi granja de flores y jardín naturalista en paralelo a mi historia personal. De cómo se cultiva un jardín que acaba cultivando a su jardinera.

-¿Qué mensaje te gustaría hacer llegar como floristera y jardinera en estos tiempos?

-El jardín, con todo lo que conlleva, es una fuente inagotable de creatividad, porque está vivo y en constante evolución. Para las personas creativas y malas gestoras, como es mi caso, la jardinería es el complemento perfecto para nuestras vidas. Es un reto creativo que nunca se acaba, nos obliga a poner el foco y nos mantiene en contacto con la naturaleza. ¡La mejor terapia!

-Estudiaste en el Reino Unido y comenzaste tu andadura profesional en el mundo del arte, ¿en qué momento descubriste que querías convertir tu pasión por las flores y la jardinería en tu profesión?

-Muchos años más tarde. Creo que en torno a los 40 años. Tuve que visitar muchos ‘jardines’ antes de encontrar el propio.

-¿Hace falta ser muy perfeccionista para ser un buen florista?

-Hay que olvidarse del ‘otro’ y dejarse llevar por el lenguaje de las flores y ramas.

-¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

-Que me apasiona.

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-¿Y qué significado tienen para ti las flores y las plantas? ¿De qué forma llenan tu vida?

-Si os leéis el libro, hay un capítulo entero dedicado a esta pregunta. ¡Sería una pena haceros un spoiler! Solo te adelanto que, ahora, ya no podría vivir sin ellas.

-¿Te enseñan cosas, aprendes de ellas?

-Aprendo de mí. Las flores y plantas son testigos incorruptibles que nos colocan ante nosotros mismos sin piedad.

-¿Qué sientes cuando se te muere una planta, una flor?

-Pues depende del contexto, porque la muerte forma parte de la vida.

-¿Cuáles son tus favoritas?

-Las dalias y las peonías son mi especialidad, pero cada vez me gustan más las flores sin pétalos como las sanguisorbas y las persicarias. Son mucho más expresivas.

-Se dice que “quien no siembra un jardín en su interior, tampoco lo siembra fuera”. Si tu jardín interior saliera a la superficie, ¿qué contemplaríamos?

-¡Depende del día! Ja, ja ja.

-¿Cómo te definirías como persona?

-Soy verso libre, como siempre me ha dicho mi tía Mercedes, la hermana de mi padre.

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En esta imagen, el libro ‘Tocar Tierra’.

¿Y cómo es tu día a día?

-Trabajo, trabajo y más trabajo, aderezado con buenos amigos y altas dosis de cultura…. y un vinazo.

-Tu padre fue una figura que despertó la conciencia medioambiental en millones de personas, ¿eres quien más se parecía a él?

-No lo creo. Las tres tenemos algo de él en nosotras

-¿Qué recuerdo tienes tú de él como padre?

-Sus abrazos, su voz, su firmeza, su olor.

-¿Cómo definirías en una frase la labor que él hizo con su manera de divulgar el amor a la naturaleza?

-La de educar a toda una nación.

-¿Hoy su mensaje seguría estando vigente?

-Absolutamente. Más que nunca.

-¿Y qué crees que pensaría de tu labor?

-Está encantado.