Episodio de auténtico terror en la vida real el que la ha tocado a vivir a Benedict Cumberbatch (Sherlock, Vengadores), quien era testigo de cómo un intruso se colaba en su hogar y ponía en peligro tanto su integridad física como la de su familia. El suceso ocurrió mientras el actor británico y su esposa, Sophie Hunter, se encontraban junto a sus tres hijos en su lujosa casa al norte de Londres. Al parecer, un hombre armado con un cuchillo de grandes dimensiones logró entrar a golpes en su propiedad y virtió graves amenazas sobre ellos.
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El sujeto en cuestión, que ha sido identificado como Jack Bissell, se abrió paso dando patadas a la puerta de hierro que hay en la entrada al jardín del domicilio, para después arrancar el interfono, escupir sobre él y comenzar a gritar frases como "¡sé que te has mudado aquí! ¡espero que se queme!". Pese a la situación de máxima tensión que sufrieron, donde llegaron a temer por su vida, el protagonista de Doctor Strange y los suyos salieron finalmente airosos y no hubo que lamentar daños personales, tal y como recoge el Daily Mail.
El atacante, que tiene varios antecedentes por otros delitos como robo o desórdenes públicos, también arrancó una de las plantas que hay en la propiedad del intérprete de 46 años y la estampó contra una de los muros. Posteriormente logró escapar del lugar pero, días después, fue detenido por la policía gracias a las huellas que había dejado y las correspondientes pruebas de ADN.
Los hechos ocurridos han visto la luz por el juicio que se celebraba a mediados de este mes de mayo, donde el acusado se declaró culpable ante el tribunal. Fue ahí donde también se desveló que Bissell había pasado antes por un establecimiento para comprar algo de comer, donde le dijo al vendedor que su intención era prender fuego a la mansión del actor.
Después del tremendo susto vivido, el nominado al Oscar y su familia tienen problemas para conciliar el sueño y aún se muestran temerosos, según reconocen fuentes de su entorno. Sobre todo, porque no entienden los motivos de ese ataque personal tan violento hacia ellos que buscaba hacerles tanto daño.
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También se ha conocido que Bisell, de 35 años, trabajó hace tiempo como chef en el Hotel Beaumont de cinco estrellas de la capital británica, donde recientemente presumía de haber creado uno de los platos que siguen en la carta. Tras el veredicto del juez, era condenado a pagar una multa y se le impuso una orden de alejamiento que le prohíbe acercarse a la familia Cumberbatch y el área en la que estos residen.
Lo que todavía no ha quedado claro es la razón del odio e inquina de este hombre hacia el que es una de las estrellas de la factoría Marvel, quien en 2015 compró esta casa de cinco dormitorios por un precio de 3,5 millones de libras (4.000.000 de euros). En ella habita junto a su esposa, también actriz, cantante y dramaturga con la que se casó hace casi una década y tienen tres hijos en común: los pequeños Christopher (7 años), Hal Auden (5) y Finn (4).
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