Un gran susto es el que se han llevado los fans de Alejandro Sanz. El artista, de 54 años, publicó un alarmante mensaje sobre su salud mental que provocaba una oleada de cariño entre sus seguidores. "No estoy bien. No sé si esto sirve de algo, pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado.... Estoy trabajando para que se me pase… llegaré a los escenarios y algo dentro me dirá qué hacer. Peroa veces no quiero ni estar. Literalmente", dijo creando una gran alarma. El cantante aclaraba horas después el por qué de su mensaje: "He tenido un brote fuerte este fin de semana y aunque aún no termina de llegar la luz, parece que se ha despertado una luciérnaga en mi pecho. No quiero suspender la gira porque creo que con la ayuda correcta y un poco de comprensión y apoyo en los shows, lo vamos a sacar adelante", revelaba en un intento por tranquilizar a sus seguidores.
Si echamos la vista atrás no es la primera vez que Sanz sufre una crisis emocional, el músico ya habló de ello a finales del año pasado cuando se cumplieron 25 años de su éxito Corazón partío. "He pasado un tiempo triste, musicalmente vacío, enfadado y falto de creatividad. Entregado a la nada”, señalaba, aunque por fortuna esa vez su malestar no duró mucho tiempo. "De repente, he recuperado mi esencia. Tengo ganas nuevas de conciertos y de grabaciones. La música empieza a arder en mí de nuevo. Solo quería compartirlo con ustedes”, contaba.
-El emotivo mensaje de James Rhodes a Alejandro Sanz: 'Siempre hay nubes, pero son temporales'
Sus problemas de salud mental se remontan a muchos años atrás. El intérprete de Cuando nadie me ve tuvo que apartarse de los escenarios en mayo de 2007 para cuidar de su salud mental. El artista tuvo que guardar "reposo absoluto por prescripción médica durante semanas", según confirmó su representante Javier Martín, lo que le obligó a aplazar su gira americana El tren de los momentos. "Esto obedece a una situación de fuerza mayor que imposibilita totalmente al artista su deseada presentación ante el público y los medios" añadió su agente. Meses después y cuando se sentía recuperado, Alejandro Sanz quiso hablar de lo ocurrido. "Me sentía cansado, sin ganas de comunicarme con los demás. Hasta que, durante un show en México, casi me desmayé, me faltaba el aire. Un yuyu que me asustó, nunca me había pasado", declaró en el diario El País. "Yo pensaba que estaba a salvo de las enfermedades modernas. Como buen español, no consideraba las dolencias psíquicas como algo serio, despreciaba la conexión entre lo mental y lo físico", manifestó.
Gracias a la terapia y al apoyo de sus seres queridos -su pareja, Rachel Valdés, y sus hijos-, el artista ha sabido cómo gestionar en más de una ocasión sus bajones anímicos y sus momentos de tristeza. Por lo que esperamos y deseamos la pronta recuperación del cantante de éxitos como Pisando fuerte, El alma al aíre o Amiga mía, al que sus seguidores esperan en su gira Sanz en vivo, que comenzará el 3 de junio en Pamplona.