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Espectacular a los 57 años, Mariló Montero levanta pasiones allá por donde va. Ya lo comprobamos en la fiesta de la primavera que organizó ¡HOLA! hace unos días con la firma Twinset, donde todo el mundo se giraba a su paso, para verla. Allí, tuvimos la oportunidad de que la presentadora nos confesara cómo es el momento que está viviendo en la actualidad. Además, Mariló nos habló de sus dos hijos y de su exmarido, Carlos Herrera, con quien mantiene una estupenda relación de amistad.
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—¿La primavera es tu época favorita del año?
—Pues es una estación muy conocida para mí, porque, con la edad que tengo, nunca me falla la primavera ningún año.
—¿Con la edad que tienes? Eso suena mal.
—¿Por qué? Lo digo porque es una fiel estación que nunca desaparece. Nos ha acompañado a lo largo de toda nuestra vida y nos esperamos lo mejor de ella porque es una etapa de mucho color. Te quita el color cetrino de la piel, cambias la ropa y te pones fresquita… Te da alegría e ilusión.
—Te revitalizas con la primavera.
—Suelo tener un carácter bastante alegre todo el año, la verdad.
—¿Hay proyectos a la vista en esta nueva etapa?
—Siempre.
—¿Alguno que puedas compartir?
—En absoluto (ríe). Las cosas no se cuentan, las cosas se hacen.
—Estarás muy contenta por la nueva campaña de Rocío, tu hija.
—Impresionante. Es que es inmensa. Para mí, es una diosa. Es el producto de un gran trabajo que lleva haciendo a lo largo de toda su carrera. Luego, El Corte Inglés es una de las firmas más importantes que hay en España y ha marcado tendencia de toda la vida. Por eso, ser una persona elegida por esta marca España para hacer campañas, en este caso de verano, es uno de los hitos de Rocío en su carrera profesional.
—Y a tu hijo también le va muy bien bien en la radio.
—Alberto sigue progresando muy bien en la cadena COPE. Trabaja mucho y lo hace con mucha ilusión. Veo que va a ser una gran estrella radiofónica. Si sigue así, lo va a conseguir.
—¿A la altura del padre o mejor?
—Cada uno tiene su personalidad. No tiene nada que ver ni hay que comparar. No, porque cada una tiene personalidades distintas. Para empezar, han nacido con muchos años de diferencia y han vivido la vida de formas distintas.
—Supongo que, como madre, será un orgullo ver que tus hijos hayan encontrado su camino. En el caso de tu hija, se fue a Nueva York a buscarse la vida. Y allí, que es la jungla.
—Rocío se la ha buscado en Sudáfrica, en Inglaterra… Luego, estudió en Estados Unidos, en Irlanda, en Suiza… Pero el paso a Nueva York fue determinante para ella. Ha conseguido trabajar en Victoria’s Secret, que es uno de los objetivos que quería alcanzar. Y lo consiguió. Y ahí sigue… También para Calvin Klein… Si dijera firmas, no terminaríamos.
—En tu caso, ¿en qué momento te encuentras ahora?
—En el que me ves: radiante, serena, en paz y con muchas ganas de vida.
—¿Te apetece tener pareja o no?
—Siempre he dicho que el estado perfecto de una persona no tiene que ser obligatoriamente al lado de otra persona. A mí me gusta vivir mi vida y trato de no vivir la vida impuesta por otra persona. Comparto grandes momentos con muy buenos amigos y soy inmensamente feliz así.
—Con lo bien que te llevas con el padre de tus hijos, te alegrarás de este momento suyo actual, después de casarse.
—Carlos es un hombre que lleva su vida íntima, bajo secreto de sumario. No seré yo quien ahora empiece a hablar de sus decisiones privadas. Y hay que respetar la intimidad de terceras personas y ahí no nos tenemos.
—Pero, te alegras por él.
—Obviamente. Siempre. Cuando yo me divorcié de él hace doce o catorce años, ya no me acuerdo… Tendría que mirar en Google cuando me divorcié de él. Siempre quería la máxima felicidad para él. La ha tenido a lo largo de todos estos años y la sigue teniendo. Evidentemente, no puedo más que sentirme feliz porque él sea feliz.