,type=downsize)
La coronación de los reyes Carlos III y Camilla, celebrada el pasado 6 de mayo en la Abadía de Westminster, nos dejó imágenes impresionantes, resultado de una ceremonia milenaria cargada de boato, simbolismo y solemnidad. Las dos carrozas doradas que utilizaron para las dos procesiones, las legendarias joyas de la Corona, las capas de armiño, los ritos ancestrales, los juramentos, el brillo de los fabulosos diamantes Cullinan que portaban el monarca y su esposa...
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
La monarquía británica puso en marcha la maquinaria de la fastuosidad y pomposidad que la hacen única en el planeta. Pero tanto en las fotografías como en la retransmisión televisiva del acto, que fue seguida por 300 millones de espectadores en todo el mundo, un detalle llamó especialmente la atención: los dedos hinchados y enrojecidos de Carlos de Inglaterra mientras portaba el orbe y el cetro o cuando saludaba desde el balcón del palacio de Buckingham.
No es la primera vez que las manos del rey muestran esta anomalía, ya que tiene una enfermedad llamada dactilitis, conocida vulgarmente como “dedos en salchicha”, ya que produce inflamación y enrojecimiento de los dedos. De acuerdo con los expertos, los apéndices se inflaman a consecuencia del estrés, cuando se viaja mucho o se toma más sal en las comidas. Además del aspecto que presentan los dedos, éstos pierden movilidad y no se pueden articular bien. De hecho, se ha comentado que el día de la coronación tenían preparada una especie de vaselina para que Carlos no tuviera ningún problema en el momento en el que tenían que imponerle el anillo del soberano.
Se cree que la dactilitis puede ser un síntoma de muchas enfermedades , como la gota, la sarcoidosis o la tuberculosis, entre otras. En el caso de Carlos III se piensa que puede ser debido a una psoriasis , puesto que los dedos en salchica son uno de los rasgos clínicos de la artritis psoriásica.
Y aquí viene la sorpredente conexión con Kim Kardashian. La más famosa del multimillonario clan familiar ha hablado abiertamente y en numesas ocasiones de las enfermedades autoinmunes que padece, la psoriasis y la artritis psoriásica, sobre todo, desde que en febrero de 2019 reveló que las sufría. En la web de salud de su hermana Kourtney, la celebrity contó cómo tuvo que modificar su vida desde que fue diagnosticada.
Kardashian relató entonces cómo se despertó una mañana y no podía ni utilizar el teléfono. “Me estaba volviendo loca, ni siquiera podía levantar un cepillo de dientes, me dolían mucho las manos. Había hecho ejercicio el día anterior e hicimos un día de brazos, así que pensé que tal vez uno de los ejercicios me lastimó la mano. No se me pasó por la cabeza que pudiera ser algo grave”, contó en Poosh.
Kim habló de otro de sus brotes el año pasado, cuando tuvo que adelgazar 7 kilos en tiempo récord para poder enfundarse el mítico vestido de Marilyn Monroe en la Gala Met 2022. La empresaria se sometió a una estricta dieta que le acarreó graves problemas secundarios, como confesó en una entrevista con Allure. “La psoriasis estalló en mi cuerpo y tuve artritis psoriásica, así que realmente no podía mover las manos. Fue muy doloroso y tuve que ir a un reumatólogo que me recetó un esteroide. Me estaba volviendo loca”, reveló la hermana de Kendall y Kylie Jenner dejando claro que había sufrido hinchazón, dolor y dificultad para mover las articulaciones.