Los sueños se hacen realidad, y Sergio Busquets es una muestra de ello. Aquel niño que soñaba con estar en el FC Barcelona no solo lo logró, sino que la realidad ha superado con creces todo aquello que deseó. Ahora, después de quince temporadas, más 700 partidos y tras ganar importantes títulos, dice adiós al club de su vida. Reconoce que no es una decisión fácil, pero sí es muy meditada y cuenta con el completo apoyo de su familia, la de sangre y la que ha formado con los compañeros del club. El centrocampista inicia una nueva etapa llena de cambios en la que hay una constante que se mantiene: la estabilidad y plenitud que le dan su mujer y sus dos hijos, su motor.
-¿Qué ha sido de los jugadores españoles que ganaron a Holanda en la final del Mundial de Sudáfrica?
Ha pasado casi una década desde que los caminos de Busquets (34) y Elena Galera (32) se cruzaron y durante todos estos años siempre han llevado la discreción por bandera. Ella trabajó como enfermera en el Parc Taulí Hospital Universitari de Sabadell y actualmente está volcada en el proyecto personal que ha creado con el futbolista, al que intenta apoyar siempre en sus partidos, celebrando desde las gradas del Camp Nou las victorias y reconfortándole tras las derrotas. El mejor regalo de la pareja es ver crecer a sus niños, Enzo y Levi, de 7 y casi 5 años respectivamente. Ambos nacimientos cambiaron sus vidas y disfrutan haciendo planes con ellos. Ahora los cuatro emprenderán un nuevo rumbo que, con toda seguridad, supondrá un gran aprendizaje y una bonita experiencia.
Busquets, que tiene el dorsal 5, es uno de los jugadores más queridos en el vestuario del Barça y de La Roja. Además, su pareja ha congeniado muy bien con las parejas de otros futbolistas, una situación que ha propiciado que compartan muchos planes más allá de los terrenos de juego y que se sigan viendo aunque sus carreras hayan tomado otros rumbos. Entre las íntimas de Elena se encuentran Romarey Ventura, Sofi Balbi, Daniella Semaan, Melissa Jiménez y Antonela Roccuzzo. A esta última, de hecho, ha ido a visitarla a París, demostrando que la distancia no es un obstáculo para su amistad. También se lleva muy bien con Alice Campello y Beatriz Espejel aunque sus maridos no formen parte del club blaugrana.
Sus negocios más allá del fútbol
El deporte forma parte del ADN de Busquets ya que su padre, Carlos Busquets, fue portero del Barça. Además, ha compaginado sus obligaciones con el balón con los negocios. Tiene su propio campus de verano para que los niños practiquen fútbol; es socio de algunas tiendas de Manolo bakes, los famosos minicroissant que no dejan de extenderse por toda España; y a finales del pasado año invertía en Heura, firma de productos vegetales alternativos a la carne a la que también se sumaron otros rostros conocidos como David Broncano y Ricky Rubio.