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La mayoría de las jóvenes latinoamericanas sueñan con su fiesta de los quince, el equivalente a la puesta de largo de las españolas. Taína Gravier, la más pequeña de los cuatro hijos de Valeria Mazza y Alejandro Gravier, hizo realidad su sueño el pasado sábado 22 de abril, día en el que celebró su decimoquinto cumpleaños. Como se suele decir, la top model argentina y su marido tiraron la casa por la ventana para la gran celebración, que reunió a más de 200 invitados en ‘La Barranca’, su residencia de Acassuso, en Buenos Aires.
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Una princesa roquera
La fiesta, inspirada en un bosque encantado, tuvo lugar en el gran jardín de la propiedad, donde se montó una carpa, con una iluminación espectacular y una pista de baile en la que los asistentes pudieron moverse al ritmo de la música de un DJ. Además, se dispusieron varios ambientes, todos decorados con flores naturales.
Para su gran noche, Taína lució un vestido realizado especialmente para ella por Benito Fernández, íntimo amigo de la familia, que diseñó un vestido blanco de escote corazón, con el cuerpo bordado en forma de panal de abeja y falda de largo asimétrico, elaborada con varias capas al bies. Para poder bailar con toda comodidad, Taína no renunció a sus botas de estilo militar, consiguiendo un look de princesa roquera muy trendy.
Flores naturales para recrear un bosque encantado, una tarta gigante de chocolate, el vals de la Cenicienta, dos cambios de look… Taína protagonizó un cumpleaños inolvidable
Además de sus padres y abuelos, la joven estuvo acompañada por sus tres hermanos, Balthazar, Tiziano y Benicio, que no querían perderse una ocasión tan especial; de hecho, Balthazar viajó desde Madrid, donde reside actualmente, y Tiziano acababa de llegar de competir en el circuito europeo de esquí. La protagonista de la noche contó, además, con sus compañeras del colegio Northlands de Olivos.
La fiesta estuvo cargada de momentos especiales, pero, sin duda, uno de los más inolvidables fue cuando la cumpleañera bailó con su padre un vals, el mismo que la Cenicienta bailó con su príncipe en la versión de Disney de 2015. Taína tuvo, además, una impresionante tarta de cumpleaños de chocolate, su sabor favorito, y de forma horizontal, sobre la que se dispusieron las 15 velitas que sopló tras pedir un deseo.
Después, la joven cambió su vestido por un look más cool, un conjunto creado por la diseñadora argentina Cynthia Kern, compuesto por cuatro piezas: un blazer, un cropped top con la espalda descubierta, unos pantalones sueltos y unos shorts de color blanco con más de 300 cristales tornasolados bordados. A pesar de que muchos esperaban que Taína actuara en su propia fiesta, la hija de Valeria Mazza no cantó para sus invitados, como había anunciado. Unas semanas antes, la pequeña de la familia Gravier realizó su debut artístico como cantante en el festival Warmichella, que se celebró en el Centro de Convenciones de San Isidro. La joven, que compone sus propias canciones, interpretó cuatro temas acompañada por la guitarrista Nana Arguen.
Heredera de la belleza de la supermodelo —que esa noche estaba radiante con un vestido irisado de escote halter y espalda desnuda—, Taína es todo un referente en las redes sociales. Solamente en TikTok, donde comparte vídeos mostrando su talento para la canción y para el baile, ya cuenta con cerca de 55.000 seguidores. “Es muy artista, le gusta mucho la moda, pero también le gusta mucho cantar, bailar, actuar… La verdad es que no sé en qué va a terminar esto, pero será su elección. Tiene mucha personalidad”, nos comentaba Valeria, en estas mismas páginas, sobre el futuro de su hija.
Como regalo anticipado de cumpleaños, días antes de la fiesta, Taína recibió una gran sorpresa: sus padres la llevaron a la primera de las tres actuaciones que Bizarrap ha ofrecido en Buenos Aires. “Todavía sigo sonriendo de lo bien que la pasamos. Fue la mejor sorpresa de cumpleaños”, expresó Taína, que es fan incondicional del productor.